La Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) se encuentra en las etapas finales de decisión respecto a la OPA que BBVA planea lanzar sobre Banco Sabadell. Fuentes cercanas al proceso han informado a Europa Press que ya se están llevando a cabo reuniones entre la Dirección de Competencia, que está realizando el análisis, y la sala encargada de tomar la decisión. Se espera que la resolución se dé a conocer en las primeras semanas de abril.
En este momento, la CNMC está evaluando la operación en fase 2, tras determinar en noviembre de 2024 que era necesario un análisis más exhaustivo para resolver las inquietudes sobre el impacto en la competencia en el mercado del crédito a pymes y en la adquirencia. Para mitigar esos riesgos, BBVA presentó ciertos compromisos en fase 1, que incluyen mantener la financiación circulante en Sabadell y asegurar el volumen de crédito a pymes que no cuenten con otro proveedor distinto durante 18 meses. Sin embargo, según el diario ‘Expansión’, la CNMC habría solicitado la extensión de estas medidas a 24 meses para reducir la posibilidad de que Sabadell salga del mercado.
El consejero delegado de Banco Sabadell, César González-Bueno, ya ha indicado que no espera que se impongan ‘remedies’ estructurales para la aprobación de la OPA
Una vez que se confirme la decisión de la CNMC, que probablemente incluirá compromisos si se acuerdan con BBVA o condiciones si es la CNMC quien los impone, el siguiente paso será la fase 3. Esta fase involucra la revisión de la operación por parte del Ministerio de Economía, que debe decidir en un plazo de 15 días si eleva el caso al Consejo de Ministros. Este último contará con 30 días adicionales para analizar la operación y decidir sobre posibles condiciones fuera del ámbito de competencia.
La Ley de Defensa de la Competencia proporciona una lista de criterios, que no es exhaustiva, para guiar la decisión del Gobierno. Este incluye aspectos relacionados con la defensa nacional, protección de la salud pública, y otros factores relevantes. Cabe resaltar que el Gobierno ha expresado su preocupación ante la OPA por el riesgo que podría implicar en la inclusión financiera y la cohesión territorial. No obstante, BBVA se muestra optimista y confía en que los compromisos presentados ante la CNMC ayuden a persuadir al Gobierno para que apruebe la operación.
Si se da luz verde a la OPA, el siguiente paso será la aprobación del folleto por parte de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y la apertura del plazo de aceptación, donde los accionistas tendrán la oportunidad de decidir si venden o no sus acciones a BBVA. En caso de que el banco obtenga la aceptación de aproximadamente el 50% del capital social de Sabadell, la operación avanzaría hacia una segunda fase que implica la fusión por absorción de Sabadell por parte de BBVA. Sin embargo, BBVA ha manifestado que su escenario principal no comprende la OPA sin fusión, aunque se mantendrán las sinergias previstas de 850 millones de euros.
El presidente de Sabadell, Josep Oliu, ha insistido en que el Gobierno necesita ser claro respecto a sus intenciones de aceptar una fusión entre las dos entidades, y si no es así, debería especificar las condiciones de gobernanza corporativa necesarias para preservar la competencia, considerando que BBVA se convertiría en el mayor accionista de Sabadell.