El resort de Isla Lagarto supone un enclave único para disfrutar de la Gran Barrera de Coral
En una ubicación privilegiada junto a la Gran Barrera de Coral, enclavado en la reserva natural de la Isla Lagarto, se encuentra el resort más septentrional de Australia: Lizard Island Resort. Es el único complejo de este tipo ubicado dentro de las 1.013 hectáreas que confirman el Parque Nacional, en una ubicación privilegiada a la orilla del mayor arrecife de coral del mundo. Solo se puede acceder en avión a través de un espectacular vuelo panorámico de una hora sobre la Gran Barrera de Coral.
Lujo en naturaleza
El resort está adaptado a la naturaleza de la isla, con solo 40 habitaciones, suites y villas privadas ‘camufladas’ en la maleza de la selva. Una oferta pequeña pero exclusiva, siendo una experiencia inigualable para aquellos pocos afortunados que consiguen hospedarse allí. Desde habitaciones hasta las villas privadas con playas exclusivas, cada espacio del hotel se ha pensado y cuidado al detalle. En cada sala, la sobriedad minimalista de la decoración (con colores neutros inspirados en el arrecife) se fusiona con los colores vivos de la naturaleza que envuelve cada edificio provocando una atmosfera única en la que los huéspedes pueden disfrutar de las máximas comodidades, sumergidos en plena naturaleza.
Y después del descanso en las playas de aguas cristalinas, de la degustación de comida en los restaurantes gourmet o de la jornada de relajación en el spa del resort, la esencia de este hotel radica en su oferta de actividades. En tierra, rutas privadas por el corazón de la isla para descubrir paisajes naturales casi inexplorados, viajes al pasado descubriendo más sobre la historia aborigen australiana o el avistamiento de aves alzando la vista al cielo para contemplar las miles de especies que habitan la isla.
El gran tesoro azul
Por mar, un abanico de actividades únicas e inigualables gracias a la privilegiada ubicación de la isla. La principal actividad, y gran atractivo, es el esnórquel. Bucear por los mejores arrecifes de coral de mundo permite compartir viaje con una fauna marina única, entre la que destacan tortugas, delfines, almejas gigantes e incluso tiburones o ballenas en algunos meses del año. Una aventura marina espectacular, guiada por instructores profesionales que velan tanto por la seguridad del turista como por la conservación de este tesoro natural.
Todas las experiencias marinas son coordinadas y realizadas a partir de la flota de embarcaciones con las que cuenta el hotel. Y, para aquellos que no quieren sumergirse por los fondos marinos, también existe la posibilidad de disfrutar del océano desde la superficie con viajes en barco, kayak o paddle surf para los más aventureros.
Visitar la Gran Barrera de Coral es imprescindible en cualquier viaje a Australia, siendo la isla Lagarto el mejor ‘puerto’ desde el que salir a surcar las aguas en la búsqueda de una flora y fauna marina únicas en la tierra.
Más allá del mar
Y, para aquellos turistas que quieren disfrutar de jornadas de relajación, no tienen que salir del complejo, puesto que el hotel cuenta con actividades de reequilibrio y rejuvenecimiento. Actividades pensadas para la recuperación y meditación, desde la práctica de yoga en playas de arena blanca hasta sesiones de tratamientos corporales en el spa Essentia.
Toda la oferta del Lizard Island Resort está pensada para el turista y para la naturaleza. Mientras que, por un lado, los turistas pueden disfrutar de los servicios propios de un hotel de esta categoría (habitaciones exclusivas, restaurantes gourmet salas de gimnasio y spa, etc.), por el otro se encuentra la conservación y preservación de un espacio natural privilegiado. Una burbuja de lujo enclavada en un paraje natural inigualable
