“Con nuestras compras, decidimos el mundo que queremos dejar a nuestros hijos” , Luis Font de Robin Good
Luis Font, diplomado en Ciencias Empresariales, licenciado en Investigación y Técnicas de Mercado y Master de Marketing y Ventas, es un emprendedor social y reivindicativo del capitalismo consciente. Durante 15 años, ha compaginado su pasión por los negocios emprendiendo y trabajando en varias multinacionales (Unilever, Panrico, Gallina Blanca) y colaborando en diferentes proyectos sociales. Su debilidad es crear negocios de impacto social para mejorar la vida de las personas con capacidades diferentes.
Co-Fundador de ‘Celebra la Vida’, ‘Asociación Veins del Món’, ‘Cerveza Mendrugo’, ‘Asociación Nostos África’ y ‘CerdanyaLovers’. Patrono de ‘Por Una Sonrisa en África’ y business angel de más de 10 empresas. Capital analiza con Font su último proyecto, ‘RobinGood’, marca social fundada en el 2019 cuyo propósito es contribuir a la inclusión socio-laboral de colectivos vulnerables mejorando la profesionalización de los pequeños productores/obradores y ofreciendo salida comercial a sus productos.
¿Cómo surge Robin Good?
Trabajé casi 10 años en empresas de alimentación. Mientras trabajaba allí, conocí los yogures de La Fageda. Es una marca muy conocida en Cataluña, cuyos productos los elaboran personas con capacidades diferentes, sobre todo, con discapacidad intelectual. Me decía a mí mismo que tenía que haber más marcas como esta en los supermercados. Así fue como hace cuatro años y medio me lancé a crear una marca con valores y propósito social como es Robin Good ahora.
¿Cómo funciona RobinGood?
Nuestra misión es generar empleo para personas en riesgo de exclusión social, porque creemos que el trabajo es lo que cambia la vida de la gente. A día de hoy, trabajamos con cinco centros especiales de empleo en España en los que fabricamos las tres familias de productos que tenemos: galletas, palitos de pan y energy balls, unas barritas energéticas. Para que el producto pueda tener la marca RobinGood tiene que cumplir unos requisitos: que esté fabricado o manipulado en una fundación o en un centro especial de empleo en España. Esto es lo que nos diferencia del resto de marcas que hay en el mercado.
¿Cómo se financia?
Hemos hecho tres rondas de inversión en cuatro años, aunque todavía no hemos llegado al ‘break even’, algo que con toda probabilidad será en 2024. Es probable que en septiembre u octubre hagamos otra ronda.
¿Reciben ayudas de las administraciones?
No hemos conseguido participar en ninguna solicitud. Tenemos una dificultad y es que somos una sociedad limitada. No nos hemos constituido como una asociación ni una fundación, porque, si no, no hubiéramos conseguido inversores de impacto social, que es lo que buscamos inicialmente. Sí que recibimos una ayuda de ‘Eaty food’, que es una entidad europea. Nos ayudaron con 100.000 euros al principio, pero no hemos vuelto a solicitar ningún tipo de ayuda más.
¿Cree realmente que la sociedad es sensible a este tipo de iniciativas?
Cada vez hay más conciencia, pero cuesta que la gente tenga esa conciencia todo el año a la hora de tomar las decisiones de la cesta de la compra. Interfieren otros factores como son el económico. A la hora de la verdad, en el momento de llenar la cesta de la compra, el driver de decisión sigue siendo el precio.
Tenemos más éxito en clientes de impulso, como los que compran en aeropuertos, en una máquina vending, en un hotel, en una tienda de paso, en una línea de caja… Ahí no es tan importante el precio, si no que el producto tenga una presentación bonita y que transmita esa historia social.
Desde RobinGood queremos concienciar al consumidor de que, con nuestras decisiones de compra, vamos a decidir el mundo que queremos dejar a nuestros hijos. Sabemos que esto significa un sacrificio a corto plazo en el bolsillo de la sociedad y que igual no está dispuesta a hacerlo.
¿Cuáles son los puntos de distribución y donde podemos encontrar productos de RobinGood?
Actualmente estamos en distintas cadenas de supermercados en España: El Corte Inglés, Eroski, BM, Veritas y Casa Ametller, estas dos últimas, en Cataluña. También en Grupo Arias, que es un cliente muy importante para nosotros, con todas las gasolineras y aeropuertos de España. También en hoteles, en alguna aerolínea como Volotea…
En septiembre empezamos en Vueling. Tenemos clientes muy diversos: por ejemplo, las heladerías Ben&Jerry’s nos compran nuestras galletas para usar como toppings en sus helados. Además, vendemos todos los productos online.
¿Como emprendedor, ¿cómo valora el ecosistema del emprendimiento en España?
Emprender en España es muy complicado. Faltan recursos para apoyar a los emprendedores. Creo que se debería ser más flexibles con startups a la hora de prestar dinero. Encontrar inversión en el caso de impacto real es difícil, hay mucho ‘social washing’ en el sector de los fondos de inversión muy grandes.
Uno de vuestros pilares habla de consumo sostenible y responsable. ¿Cómo crees que se puede concienciar a la sociedad?
Cambiar la mentalidad del ser humano a largo plazo es complicado. No vamos a cambiar nuestros hábitos de consumo por dejar un mundo mejor. Pero sí que creo que, como en el caso de los productos ecológicos, antes no había tanta conciencia y ahora cada vez hay más consumidores dispuestos a consumirlos. Con lo social creo que pasará lo mismo, igual ahora es un 1% de la población, en 10 años será un 10% que quiere consumir productos con propósito.
¿Próximos retos u objetivos?
Uno de los retos principales es conseguir tener productos más competitivos, ya que con algunos perdemos dinero. Necesitamos conseguir que la compañía sea rentable. Estamos luchando por mejorar los costes de la gama que tenemos en la actualidad.
El año que viene la idea es lanzar nuevos productos y estar en más puntos de venta. Como te he comentado, en septiembre entramos en Vueling y creo que esto nos va a dar mucha visibilidad de marca. La idea es entrar en clientes que nos den visibilidad, clientes estratégicos que nos aporten reconocimiento de marca.
Su visión de futuro, en una frase…
En tus decisiones de compra, puedes cambiar el mundo.
