Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Lifestyle

Sena (Oblack Caps): "Es imposible fabricar en Europa, no hay ni la maquinaria ni el personal suficientemente cualificado"

Por Mario Talavera

Las gorras de Oblack Caps se han hecho famosas porque las llevan todo tipo de famosos, lo que las ha llevado a un amplio reconocimiento y a elevadas cifras de ventas

Crear un producto es fácil, confiesa José Luis Sena a Capital. Es el CEO de Oblack Caps, que bien podrían recibir el sobrenombre de "las gorras de los famosos". La lleva el cantante Rauw Alejandro, su compañero de profesión Omar Montes, además de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz-Ayuso. En breve, su aterrizaje en Estados Unidos irá de la mano de Ilia Topuria, una de las grandes figuras de UFC, artes marciales mixtas.

Pero volviendo al principio, Sena explica que crear un producto concreto, como son estas gorras, "no fue difícil", como tampoco lo fue crear una imagen de marca. "Lo difícil fue salir al mercado y convertir lo que has proyectado en una realidad y eso, a su vez, en ventas", resume el CEO de esta marca.

Los pasos para conseguirlo fueron las siguientes: analizar el mercado, las marcas competidoras, su calidad y su atención al cliente. El reto consistía en diseñar un producto mejor en todos esos aspectos y a un precio más bajo. "Vendemos lo mismo, pero dando muchísimo más: aparte de ser bonita, me atienden bien, es de calidad y la llevan mis referentes", explica Sena.

Es así como esta empresa pretende alcanzar las 200.000 gorras vendidas este año, mientras que el año que viene ese objetivo podría duplicarse solo en Europa. Si se cumple el plan de llevar este producto a Estados Unidos, el plan podría cambiar y llegar a cifras mucho más altas, adelanta Sena.

Para llegar a esa cantidad, la marca de la oveja negra pasó varios años esperando su momento. La idea primigenia surge a raíz de 2012, cuando un estudio discográfico radicado en Ibiza empieza a lanzarlas como merchandising. La calidad no era la de hoy, pero las gorras gustaron lo suficiente como para que sus creadores se decidieran a lanzar una colección más avanzada.

"No había nadie que hiciera gorras desde cero en Europa", recuerda Sena. Eso les llevó a un proceso de análisis y búsqueda. En 2017 exploraron China para buscar fábricas, que finalmente encontraron, si bien no fue hasta 2019 cuando la marca nació oficialmente. Como a muchas empresas, la pandemia afectó a la capacidad para importar sus productos, pero he ahí que Oblack Caps experimentó una situación muy distinta a la de otras compañías en esos meses.

"Tuvimos un aumento brutal de las ventas, las multiplicamos por tres o por cuatro", desarrolla Sena, "nosotros no nos lo explicábamos, la gente estaba encerrada en sus casas". A pesar de las dificultades para importar sus productos, esos problemas se acabaron resolviendo y la popularidad de la marca siguió en aumento.

En esos meses, desde Oblack Caps se plantearon traer parte de su producción a Europa. "Intentamos montar una mini línea de producción para ver si podíamos copiarnos nosotros mismos las gorras, pero no cumplían con los estándares de calidad", reconoce. La conclusión al respecto de Sena es clara: "Es imposible fabricar en Europa, no hay ni la maquinaria ni el personal suficientemente cualificado para fabricar las mismas gorras que se fabrican en Asia".

Ello implica que, como dice Sena, se debe dar algo más, una experiencia de compra especial, además de una buena capacidad logística para dar servicio en los 24 países en las que está presente la marca. Para ello, Oblack Caps colabora con Amazon para aprovechar su "gran logística". Esto fue clave en la expansión, comenta Sena, puesto que permite dar un servicio en 24-48 horas a un precio razonable. Si estos envíos se hicieran por medio de otras compañías logísticas, sumarían una cifra extra de alrededor de veinte euros, lo que para Oblack Caps significaría estar "fuera del mercado".

Próximos pasos

La ambición de la marca es grande. Sus objetivos de ventas superan las seis cifras, pese a que en 2022 la meta eran las 70.000 gorras vendidas y no se alcanzaron, dice Sena. Sin embargo, su expansión a Estados Unidos podría traducirse en un gran boom. De hecho, este podría ser el primer paso para abordar el resto del continente americano, de gran interés para la empresa.

Para ello se ha puesto en marcha la ya mencionada colaboración con Ilia Topuria. Aun así, Sena añade que no siempre se ha podido medir la influencia de este tipo de estrategias. Es más, "las que mejor han funcionado son las que han sido orgánicas", como fue el caso de Rauw Alejandro: "Todo el mundo quería esas gorras".

Únete a nuestra Newsletter

A través de nuestra Newsletter con Capital te hacemos llegar lo más importante que ocurre en el mundo de la #economía, los #negocios, las #empresas, etc… Desde las últimas noticias hasta un resumen con toda la información más relevante al final del día, con toda comodidad.