El edadismo laboral es una forma de discriminación que afecta, en mayor medida, al talento senior, y que ocurre cuando las decisiones de empleo tienen en cuenta la edad de los individuos en lugar de sustentarse en sus habilidades, experiencia o desempeño laboral. Al otro lado de la balanza se sitúan los jóvenes, una generación con inquietudes diferentes, pero que también encuentran esta discriminación como una dificultad más a la hora de incorporarse al mercado laboral.
Este sesgo, a menudo se hace visible tanto en la contratación como en la promoción de empleados en las empresas, debido a la creencia errónea de que los trabajadores más jóvenes son más innovadores o que los trabajadores más veteranos no son capaces de adaptarse a los cambios, especialmente cuando hablamos de la tecnología.
Así, en el ámbito de los recursos humanos, el edadismo laboral representa un desafío importante, ya que puede tener consecuencias negativas tanto para los empleados afectados como para las organizaciones en su conjunto. Por un lado, los trabajadores mayores pueden experimentar dificultades para encontrar empleo o enfrentarse a un trato injusto en el lugar de trabajo debido a estereotipos relacionados con su edad. Por otro, las empresas que perpetúan el edadismo laboral corren el riesgo de perder talento valioso y diverso, así como enfrentarse a demandas legales y a daños en su reputación.
En este contexto, Gi Group Holding, multinacional que ofrece soluciones 360º de RRHH, ha querido conocer la opinión de los españoles sobre el impacto que tiene el edadismo a la hora de encontrar empleo, y ha analizado las causas de la discriminación por edad en el entorno laboral, así como las posibles soluciones. Para ello han elaborado el informe ‘El edadismo y su impacto en el mercado laboral’ en el que se ha encuestado a más de 2000 españoles. Asimismo, sus respuestas han sido analizadas por varios expertos en Recursos Humanos.
En este contexto, ante la pregunta clave “¿Es habitual que las empresas utilicen la edad como sesgo a la hora de contratar o promocionar personal?”, la respuesta ha sido afirmativa para prácticamente la totalidad de los trabajadores españoles encuestados (95,7%). Además, según este estudio, más de la mitad de los españoles encuestados reconocen que en su empresa, o en la última en la que han trabajado, han existido prejuicios vinculados con la edad en el momento de contratar o promocionar personal.
Silvia Martínez, Corporate HR Manager de Gi Group Holding España: "Es inaceptable que las personas sean juzgadas o excluidas debido a su edad, ya sea por considerarlas demasiado jóvenes o mayores para ciertas responsabilidades o roles"
Es evidente que el edadismo es una realidad en el mercado laboral, así lo afirman casi nueve de cada 10 españoles que aseguran la existencia de estos estereotipos en el mercado laboral. Las causas son diversas, pero destacan principalmente la percepción errónea que existe en la sociedad de hoy en día sobre lo que significa hacerse mayor.
Sin embargo, muchos empleados coinciden en que el hecho de cumplir años no es un impedimento para dejar de ser productivo, ya que así lo afirman más de ocho de cada 10 trabajadores españoles encuestados. No obstante, si ampliamos el análisis y fijamos la atención en la edad, son llamativos los distintos puntos de vista que convergen en esta afirmación. Mientras que un tercio de los encuestados entre los 18 y los 34 años opina que la productividad de un joven es superior a la de una persona mayor, el 91,3% de las personas entre 55 y 65 años asegura lo contrario.
Para Silvia Martínez, Corporate HR Manager en Gi Group Holding España, “la errónea percepción del envejecimiento conlleva la discriminación en el lugar de trabajo, y es inaceptable que las personas sean juzgadas o excluidas debido a su edad, ya sea por considerarlas demasiado jóvenes o mayores para ciertas responsabilidades o roles. La diversidad generacional no sólo es una cuestión de inclusión, sino también de aprovechamiento de las distintas experiencias y habilidades que cada grupo aporta”.
Según el estudio de Gi Group Holding, más de la mitad de los españoles afirman haber sufrido, personalmente o en su entorno, algún episodio de discriminación laboral por la edad. Mientras que más de 7 de cada 10 encuestados entre 18 y 24 años reconocen haber vivido algún momento de este tipo, casi la mitad de los trabajadores entre 55 y 65 años asegura lo contrario. Del mismo modo, el 6% de los jóvenes afirma haber sufrido algún episodio de discriminación a nivel personal.
“Es fundamental reconocer que la brecha digital no sólo afecta a ciertas generaciones, sino que también tiene un impacto significativo en la capacidad de acceso y participación en el mercado laboral. Es por ello, por lo que debemos evitar caer en la trampa de etiquetar a las generaciones de manera generalizada, ya que cada individuo posee una realidad única y merece ser considerado en su totalidad. Desde las organizaciones tenemos el poder y el deber de dotar de herramientas para acompañar a todas las personas, y, por ende, a todas las generaciones, en su desarrollo”, añade Silvia Martínez.
Alberto Mateos, KAM de Gi Training: "Sugiero implementar programas de mentorización, tanto los tradicionales como los ‘reverse mentoring’"
El talento femenino, el más afectado por el edadismo
Del estudio ‘El edadismo y su impacto en el mercado laboral’ se desprende que más de la mitad de los encuestados considera que la creencia generalizada de la existencia de discriminación por la edad perjudica por igual a hombres y mujeres mayores de 45 años. Sin embargo, casi cuatro de cada 10 aseguran que son las mujeres las más afectadas, porcentaje que aumenta hasta el 48,6% si tenemos en cuenta sólo el testimonio femenino.
Por otro lado, si se une el género con la edad, seis de cada 10 mujeres afirman haber sido discriminadas laboralmente por la edad frente al 52,9% de los hombres que lo reconocen. La existencia de episodios de discriminación laboral por la edad es algo que resulta habitual para más de la mitad de los encuestados, que aseguran haberlos vivido personalmente o en su entorno.
Además, es importante destacar que las mujeres no son las únicas afectadas de forma mayoritaria por el edadismo, también depende de la cualificación profesional del trabajador según casi tres de cada cuatro españoles. Así, para la mitad de los encuestados, son los trabajadores menos cualificados a quienes este tipo de discriminación afecta en mayor medida, porcentaje que baja hasta el 42% en el caso de los mandos intermedios y al 25% entre los directivos.
María de Vicente, Corporate KAM de Gi Group Holding: "Es importante que desde las empresas implementemos políticas y prácticas inclusivas que valoren y aprovechen la diversidad de edad en el lugar de trabajo para fomentar la innovación y la creatividad"
La formación, clave para reciclar a los perfiles senior
La formación es la pieza clave para romper barreras, así lo afirma Alberto Mateos, KAM de Gi Training, “es necesario fomentar un ambiente de aprendizaje colaborativo y promover la igualdad de oportunidades para todos, independientemente de su edad”, una opinión con la coinciden el 63% de los españoles que asegura que la formación y la experiencia de una persona debería ser la base para contratación de personal. Además, Alberto Mateos añade “sugiero la implementación de programas de mentorización, tanto los tradicionales donde los trabajadores juniors puedan beneficiarse del conocimiento y la experiencia de sus colegas senior, como los denominados reverse mentoring, que dan la oportunidad a los más veteranos de adquirir nuevas habilidades de los más jóvenes, como podría ser en cuestiones tecnológicas y que desde Gi Training hemos organizado para diversos clientes con muy buenos resultados”.
Sin embargo, la formación parece ser la asignatura pendiente para muchas empresas según la mayoría de la población española: Tal es así que para un abrumador 83% de los encuestados, las empresas no invierten lo suficiente en formación que permita reciclar a los perfiles senior que carecen de habilidades tecnológicas. Siendo los más críticos con esta ausencia de inversión los españoles entre 45 y 64 años, pues sólo 1 de cada 10 piensa que sí se está invirtiendo lo suficiente, un porcentaje que se multiplica por tres, hasta el 33,5%, si hablamos de la opinión de los jóvenes de entre 18 y 24 años.
En definitiva, el edadismo laboral representa un gran desafío en el mercado laboral español, donde la formación y las políticas públicas parecen ser dos elementos importantes para combatirlo. Además, está estrechamente ligado a cuestiones tan clave como la jubilación, la adopción tecnológica o la diferenciación entre sectores. Te invitamos a descargarte el informe completo para así descubrir todos los resultados y conclusiones.
¿Cómo prevenir el edadismo en el mercado laboral?
El edadismo es un problema que preocupa tanto a los trabajadores como a las empresas. María de Vicente, Corporate Key Account Manager de Gi Group Holding, asegura que “es importante que desde las empresas implementemos políticas y prácticas inclusivas que valoren y aprovechen la diversidad de edad en el lugar de trabajo para fomentar la innovación y la creatividad; incluyamos programas de capacitación y desarrollo para trabajadores de todas las edades, políticas de contratación y promoción basadas en el mérito y no en la edad, y diseñemos una estrategia clara de relevo generacional identificando los puestos clave y estableciendo procedimientos estructurados para la transmisión de conocimientos. En este proceso, contar con aliados estratégicos expertos en RRHH y consultores especializados puede facilitar la implementación exitosa de estas medidas y garantizar que se ajusten a las necesidades específicas”.
Asimismo, los españoles consideran que las políticas públicas son la solución más efectiva para prevenir el edadismo laboral, y el 61,3% de los encuestados cree que la más conveniente sería bonificar la contratación de personas mayores de 45 años, seguida de la obligatoriedad de CV ciegos (48,4%) y los programas formativos para la recapacitación profesional (47,2%). Esta última medida la más demandada por más de la mitad de las personas mayores de 55 años.
Ante esta situación, los perfiles seniors buscan otras vías para conseguir un puesto de trabajo, y según el 65,3% de encuestados cree que los mayores de 45 años ven en la Administración Pública una opción viable para conseguir un empleo estable hasta el momento de su jubilación.
