La compañía de gas rusa Gazprom corta de nuevo el suministro proveniente del Nordstream 1 a través de Alemania
La compañía gasista rusa Gazprom ha iniciado este miércoles un corte del flujo de gas suministrado a Alemania a través del gasoducto Nord Stream 1 que durará tres días, justificándolo con supuestas razones de mantenimiento, según ha podido saber Europa Press.
A las 4.00 horas en Moscú (3:00 hora peninsular en España) ha tenido inicio un corte del suministro a través del gasoducto que durará hasta el próximo 3 de septiembre, según ha informado la agencia rusa TASS.
Desde Gazprom califican la suspensión como necesaria para trabajos de mantenimiento preventivo en el punto de recepción en el Greifswald alemán.
La gasística rusa indicó que en correspondencia con la documentación técnica del fabricante "cada 1.000 horas es necesario llevar a cabo un mantenimiento técnico del equipo que incluye la revisión del chasis para detectar fisuras, deformaciones, manchas de quemaduras".
Rusia ha ido reduciendo paulatinamente el volumen de los suministros por el Nord Stream con la excusa de problemas técnicos y la necesidad de reparar las turbinas Siemens del gasoducto.
El gigante ruso ya explicó el 19 de agosto que la única estación de bombeo que sigue activa se paralizará temporalmente y que, una vez concluidos los trabajos, el flujo de gas se retomará a un nivel de 33 millones de metros cúbicos diarios.
Esta cantidad sería equivalente al 20 por ciento de la capacidad efectiva. El gasoducto puede transportar hasta 167 millones de metros cúbicos diarios, según Bloomberg.
Alemania confía en este gasoducto para cubrir la demanda interna, después de que otro proyecto alternativo, el "Nord Stream 2", haya quedado aparcado por el inicio de la invasión rusa sobre Ucrania el pasado mes de febrero.
Este no es el primer caso en el que la empresa rusa alega razones de mantenimiento para provocar un corte del suministro que llega hacia Europa a través del Nordstream 1.
El 27 de julio pasado Gazprom anunció el recorte del bombeo a la quinta parte de la capacidad del gasoducto, una decisión que según Berlín responde a una "estrategia de guerra".
Los precios vuelven a subir
Aunque está previsto que el corte de suministros solo dure hasta el tres de septiembre, la Unión Europea tiene miedo de que Rusia mantenga dicho corte en una prolongada maniobra para secar los almacenes de los países miembros.
Ante el miedo de una situación ya de por sí complicada, los precios del gas han vuelto a repuntar. Alemania es uno de los países más dependientes del gas que llega desde Rusia, y su firme oposición a la invasión de Putin en Ucrania ha desatado la venganza del coloso ruso.
Alemania no tiene sus depósitos de gas listos para utilizarlo cuando llegan las vacas flacas, y aunque los tuvieras, apenas podría cubrir la demanda interna.
Mientras tanto, el Nordstream 1 ha estado funcionando a apenas el 20% de su capacidad efectiva, lo que complica aún más la grave situación del motor de Europea, al tiempo que muchos países se preparan para la llegada de un invierno que promete ser especialmente frío debido a la escasez de suministros y al auge de los precios de los mismos.
Europa ha visto como la inflación en la zona euro ha aumentado este agosto hasta el 9,1%, lo que supone una ligera subida comparado con la anterior cifra de julio, que alcanzó el 8,9% según el BCE.
Según los datos preliminares publicados por Eurostat, la escalada de los precios de la zona euro se intensificó en agosto, a pesar de que la subida interanual del precio de la energía se desaceleró al 38,3% desde el 39,6% de julio, mientras que el incremento del precio de los alimentos frescos fue del 10,9%, cuando en julio había sido del 11,1%.
