Un estudio realizado por el laboratorio seguridad P3 de referencia de Microbiología del Hospital Universitario Virgen de las Nieves de Granada concluyó que con la aplicación de este sistema se eliminó el coronavirus al 100% en menos de seis horas y que es 100% segura para las personas
Miguel Ángel Garat y Pablo Fernandez son dos emprendedores españoles afincados en Shanghai que decidieron crear la compañía CleanAir, una empresa para aprovechar la gran demanda de este tipo de productos que existe en China ante la alta concentración de polución y agentes contaminantes en el país. Adicionalmente la ubicación geográfica ofrece la facilidad para acceder a “tierras raras”, tierras con 17 elementos químicos como el escandio o el neodimio, y desarrollar tecnologías poco accesibles en otros lugares que han permitido, fruto de la investigación, mejorar la efectividad del producto, mediante métodos de dopados de materiales combinados con el sustrato catalítico.
Se centraron desde 2016 en crear tecnologías para mejorar el bienestar de las personas y pronto desarrollaron DuctFIT, una tecnología patentada -cuyo germen está en la NASA- que permite eliminar de forma eficaz y definitiva virus y bacterias, tanto en el aire como en superficies (maderas, metales, tejidos, plásticos, etc); y lo más diferenciador compatible con la presencia de humanos en las zonas a desinfectar.
La tecnología, certificada por prestigiosos laboratorios y universidades internacionales está considerada como la antiviral más avanzada de las que actualmente están funcionando en el mundo, ya que se ha comprobado científicamente que logra eliminar el 99,99% de cualquier familia de virus, incluidos los más resistentes y duraderos en superficies.
La tecnología española DuctFIT de eliminación de virus ya se ha instalado en casi 30 millones de metros cuadrados en edificios de todo tipo, desde oficinas hasta hospitales pasando por empresas, colegios y hoteles, de más de 20 países del mundo, con beneficios para la salud de millones de personas que diariamente visitan, trabajan o viven en esos establecimientos.
Grandes multinacionales, compañías, hospitales y residencias, centros del sector de la educación, de la hostelería como hoteles y restaurantes o de la Administración Pública, han confiado en esta sistema de eliminación de virus en sus instalaciones. Hospitales, entre ellos el Virgen de las Nieves de Granada, y multinacionales, como Microsoft, H&M, El Corte Inglés, Hyatt, Intercontinental Group, Ferrari, Tesla, Coca Cola, McDonalds, Pizza Hut, BBVA, … son solo algunas de las que han apostado por esta tecnología con sello español.
ESTUDIOS CIENTÍFICOS EN ESPAÑA
La tecnología ha sido certificada por prestigiosos laboratorios nacionales e internacionales. El Centro de Biología Molecular Severo Ochoa, perteneciente al CSIC y dirigido por el profesor de investigación Antonio Alcamí, concluyó que el dispositivo DuctFIT inactiva el virus Sars-CoV-2, causante del COVID-19, al 99.8% en 15 minutos.
En Mayo 2020, un estudio científico realizado en el Hospital Universitario Virgen de las Nieves de Granada (dependiente del Servicio Andaluz de Salud), concluyó que el sistema DuctFIT elimina el 100% del coronavirus, el 99,75% del virus ‘influenza A’ H1N1 (virus de la gripe) y el 99,99% del ‘enterovirus’ (que afecta al aparato digestivo y es uno de los más resistentes que existen).
Esta patente es la única tecnología de eliminación de virus que ha pasado el examen de un laboratorio de referencia de este nivel científico con virus humanos. Asimismo, laboratorios pertenecientes al ENAC (Entidad Nacional de Acreditación) han certificado la seguridad para la salud del dispositivo.
ENSAYOS CLÍNICOS CON HUMANOS
Con estos resultados, la empresa ya ha iniciado ensayos clínicos con humanos en el Hospital Virgen de las Nieves. El objetivo científico es comprobar si además de eliminar los virus en aire y superficies, y por tanto de forma preventiva reducir drásticamente los contagios, puede también ayudar a pacientes ya contagiados de Covid-19 y gripe, favoreciendo y acelerando su recuperación y reduciendo los tiempos de hospitalización, y, por tanto, ayudando a reducir colapsos en hospitales y UCIs, salvar vidas y reducir contagios en personal médico.