Según ha anunciado la compañía holandesa, Philips registró pérdidas de 151 millones de euros en los tres primeros meses de 2022, en contraste con el beneficio atribuido de 39 millones de euros contabilizado en el mismo periodo del año pasado
Philips registra pérdidas de 151 millones y avisa de escasez de suministros. Entre enero y marzo, Philips incrementó un 2,4% sus ventas, hasta 3.918 millones de euros, a pesar de la caída del 0,7% en Europa Occidental, hasta 785 millones, mientras que en Norteamérica sus ingresos aumentaron un 7,6%, hasta 1.650 millones de euros y en los mercados en crecimiento, las ventas de Philips aumentaron un 2,3%, hasta 1.072 millones, recoge Europa Press.
Por segmentos de negocio, la unidad de diagnósticos elevó un 3% sus ventas en el primer trimestre, hasta 1.911 millones de euros, y la de cuidados personales un 13%, hasta 838 millones, mientras que el negocio de cuidados conectados facturó 993 millones, un 14% menos.
Los programas de ahorro de costes implementados generaron 97 millones de euros en el primer trimestre, con un ahorro neto de 8 millones tras deducir los incrementos de costes de aprovisionamiento. En respuesta a los vientos en contra de la inflación, la compañía está implementando medidas adicionales de ahorro de 150 a 200 millones de euros para todo el año.
"La sólida demanda de los clientes y la cartera de pedidos, junto con nuestro desempeño de ventas del primer trimestre, respaldan el rango de crecimiento y expansión de márgenes para todo el año, tal como se comunicó en enero de 2022", indicó el consejero delegado de la multinacional, Frans van Houten.
No obstante, el máximo ejecutivo de Philips advirtió de "los crecientes riesgos" relacionados con la situación de Covid-19 en China, la guerra entre Rusia y Ucrania, los desafíos de la cadena de suministro y las presiones inflacionarias, que pueden afectar potencialmente la capacidad de Philips para convertir su cartera de pedidos en ventas y lograr su objetivo de margen si las condiciones se deterioran aún más.