Las ventas de coches nuevos en Francia sufrieron un desplome "histórico" del 72,25 % en marzo respecto al mismo mes del pasado año, con 62.668 vehículos, ha informado este miércoles el Comité de Constructores Franceses de Automóviles (CCFA).
Esas matriculaciones se registraron casi totalmente hasta el 17 de marzo, cuando entró en vigor el confinamiento obligatorio en Francia por la COVID-19, ha explicado a Efe el portavoz del CCFA, que añadió que a partir de esa fecha no hubo "casi nada", apenas "unos cientos" de coches vendidos.
Según la fuente, si se cumple el escenario que prevé el Gobierno respecto a que el levantamiento del confinamiento sea a finales de abril o en mayo, el descenso en el conjunto del año del mercado del automóvil galo podría ser del 20 %, con unas matriculaciones de entre 1,7 y 1,8 millones de automóviles.