Con motivo del Día Internacional de la Mujer, que se celebra el 8 de marzo, y para conocer en profundidad la realidad empresarial desde el punto de vista del liderazgo femenino, Capital celebra su Semana de la Mujer Directiva y reúne a 9 mujeres de diferentes sectores de la economía española. Hoy hablamos con Rosa Pérez, directora de Canales de Venta a Particulares de Asisa.
A nivel general, ¿qué visión tiene de la economía española?
España es una de las economías más grandes de la Unión Europea. En cuanto a los servicios financieros, España cuenta con un sistema bancario sólido y bien regulado que ha superado desafíos en el pasado por anteriores crisis.
Actualmente nos enfrentamos a los altos niveles de desempleo entre los jóvenes y a una considerable deuda pública. Además, la pandemia de la covid-19 ha tenido un impacto significativo en diversos sectores, especialmente en turismo y hostelería. Pero, aunque actualmente estamos enfrentando un nuevo desafío, España está capacitada para superarlo.
En España, un 38% de los puestos directivos están ocupados por mujeres, lo que nos ubica como el segundo país de la UE con un mayor porcentaje de mujeres directivas y el 12º a nivel mundial, según el informe ‘Women in Business 2023’ de Grant Thornton. ¿A qué cree que se debe este buen dato?
Esas cifras demuestran un cambio cultural en la forma en que se percibe el liderazgo femenino y un avance significativo en comparación con años anteriores. Es alentador ver que España se sitúa como el segundo país de la UE con mayor porcentaje de mujeres en puestos directivos, lo que indica un impulso hacia la inclusión y la diversidad en las empresas españolas. Este progreso es importante no solo en términos de equidad sino también de eficiencia empresarial y representación equitativa en la toma de decisiones.
A nivel nacional, ¿qué camino cree que queda por recorrer en este sentido?
Aunque los datos son alentadores, queda aún trabajo por hacer para lograr la verdadera igualdad de oportunidades en todos los niveles de la jerarquía empresarial. Es fundamental seguir promoviendo políticas y prácticas que fomenten la igualdad, incluyendo la eliminación de barreras y prejuicios que obstaculizan el avance de las mujeres en el ámbito laboral. Es importante continuar trabajando para garantizar que todas las personas, independientemente de su género, tengan igualdad de oportunidades en el lugar de trabajo.
Teniendo en cuenta su trayectoria profesional. ¿Qué balance haría de los cambios que ha habido en estos años en materia de igualdad?
Respecto a la participación de la mujer en el mercado laboral, ha aumentado en muchos sectores y niveles jerárquicos. Actualmente accedemos a roles y posiciones que antes no era posible.
Muchas empresas han adoptado políticas de igualdad en sus lugares de trabajo, promoviendo la diversidad y la inclusión y se han implementado medidas como la flexibilidad laboral e igualdad de oportunidades de ascenso.
En su sector en concreto, ¿qué peso tiene la igualdad?
El dato arroja esperanza y avance: en 40 años hemos pasado de un 3% de directivas en los consejos del sector asegurador a un 30% y esto demuestra un cambio cultural en la forma en que se percibe el liderazgo femenino en el país y el sector.
Rosa Pérez, directora de Canales de Venta a Particulares de Asisa: “El progreso es importante no solo en términos de equidad, sino también de eficiencia empresarial y representación equitativa en la toma de decisiones”
¿Cree que desde la Administración se lucha para que la igualdad y la conciliación sean una realidad? Es decir, ¿qué parte hay de ‘relato’ y qué parte hay de ‘acción efectiva’?
Es cierto que ha habido progresos significativos en los últimos años, pero aún queda mucho por hacer para lograr la verdadera igualdad en todos los aspectos de la sociedad.
A pesar de los avances, seguimos teniendo un problema grave en muchos países. Se ha implementado medidas para prevenir y abordar las posiciones de desigualdad con las que se encuentra la mujer, pero todavía es necesario llevar a cabo campañas de sensibilización y educación para combatir estereotipos de género y promover la igualdad desde edades tempranas.
Asimismo, el 93% de las empresas españolas cuenta con al menos una mujer en la alta dirección (4 puntos por encima de la media europea). ¿Considera esta cifra fruto de la meritocracia o se trata más bien de un cumplimiento de cuotas?
Hay aún combinación de ambos factores. Las empresas han adoptado políticas que promueven activamente la presencia de mujeres en el liderazgo, lo que puede resultar en la selección de mujeres altamente cualificadas. Sin embargo, es innegable que la presión social y legal para mejorar la representación femenina en la alta dirección puede haber llevado a las empresas a cumplir cuotas mínimas.
En cuanto a la brecha salarial de género, esta se ha situado en el 18,6% (la más estrecha de los últimos 15 años), según los últimos datos de la EPA, lo que supone que las mujeres deberían cobrar 4.341 euros de media más al año para recibir el mismo salario que los hombres. ¿Cree que será posible cerrar esta brecha? ¿Qué se necesita, a nivel empresarial, para conseguirlo?
Creo que la brecha salarial todavía persiste pese a los esfuerzos para reducirla implementado leyes y políticas para promover la transparencia salarial y garantizar la igualdad de remuneración por trabajo de igual valor.
En este sentido, es importante que las empresas realicen evaluaciones periódicas de sus estructuras salariales y de los puestos de trabajo para la identificación de posibles disparidades salariales y abordarlas proactivamente con el fin de eliminar sesgos en todas las áreas de la organización.
