“Un sector sin formación y preparación continua es un sector sin futuro, que no progresa”
El capital humano es un activo imprescindible y el de mayor valor en el sector turístico y hotelero. La formación y la gestión del talento son los ejes en los que debemos centrar el foco con la mirada puesta a corto y a largo plazo.
La formación profesional y especializada es clave para conseguir un sector mucho más profesionalizado y para mejorar la competitividad de la industria turística y hotelera en España. Para poder gestionar debidamente el conocimiento que se genera en las empresas de la principal industria de nuestro país, es necesario formar a los equipos y los profesionales adecuadamente, con la finalidad de prepararlos para un mercado global y competitivo, que reclama estar al día en el uso y la aplicación de las nuevas tecnologías y ser óptimos en materia sostenible.
Estar formado siempre ha sido muy necesario, pero en la coyuntura del sector hotelero actual, más que nunca. España tiene una fuerte apuesta por el turismo de calidad, lo cual le ayuda a aportar un valor diferencial al resto de competidores por lo que es obligado estar a la vanguardia en temas de sostenibilidad e innovación, además de, claramente, tener competencias digitales. El reciclaje y el aprendizaje deben ser continuos, ya que tanto la innovación y la digitalización como la sostenibilidad son palancas que nos ayudan a trabajar en este sentido.
Debemos aprovechar el momento de cambio en el que nos encontramos y los 3.500 millones de euros de los fondos europeos Next Generation, en el llamado componente 14 del sector turístico, así como los del componente 19, que se dedican a la formación, para que el sector siga siendo líder a nivel mundial. No solo en cuanto a volumen de turistas y facturación, sino para continuar estando a la cabeza en lo que ha competitividad turística se refiere.
La rápida transformación digital de la sociedad en estos últimos años ha provocado que debamos tener capacidades y competencias digitales para poder aprovechar las oportunidades que nos ofrece.
La innovación y la tecnología son puntos de apoyo que nos ayudan a evolucionar para ser más sostenibles social, económica y medioambientalmente en el sector. Además, la innovación tecnológica es una carrera que no tiene fin. La tecnología avanza, el cliente la adopta y, como empresarios hoteleros, tenemos que estar ahí.
Los clientes nos piden progresar en estos campos, debemos desarrollarnos tecnológicamente como empresas para lograr ser más eficientes, beneficiando al sector en su conjunto. Con el foco puesto, por un lado, en dar a los clientes lo que demandan y, por otro lado, en comprometernos con la sostenibilidad y el cuidado del planeta. Y todo ello, aumentando nuestra competitividad. Un sector sin formación y preparación continua es un sector sin futuro, que no progresa. La preparación es la base de cualquier comienzo.
Por ello, desde ITH, y dada su importancia para el futuro, apostamos por ofrecer un enfoque académico innovador que amplíe el talento y la proyección de los alumnos para atender a la evolución y a las necesidades de mejora de competitividad de las empresas del sector turístico. El objetivo principal es el de aportar las herramientas que permitan responder a los retos y a los desafíos actuales y mantenerse al tanto de las nuevas tendencias y las mejores prácticas.
Nos encontramos en una industria en la que las personas dan servicio a otras personas, por ello es importante que los futuros profesionales estén preparados tanto en habilidades conocidas como “blandas” o soft skills, -que son una combinación de habilidades sociales, habilidades de comunicación, rasgos de personalidad, actitudes, atributos profesionales, inteligencia emocional, entre otros– como completarse con la formación y las habilidades “duras”, hard skills, para conseguir el perfecto equilibrio.
