“La tecnología está en el centro de diseñar una nueva sociedad”
Fujitsu: “El sector financiero español es un referente mundial en tecnología, por delante de la banca europea o la americana”
El ritmo de la Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) en España, desde el estallido de la pandemia, es imparable y la transformación de la sociedad es cada vez más notoria. Los fondos europeos pueden ser la clave para cubrir las necesidades de las empresas de incorporar la digitalización en su actividad, incluido un Plan de Ciberseguridad con más de 1.200 millones de euros de inversión.
Con presencia global en más de 70 países, Fujitsu es una compañía japonesa especializada en TIC que ofrece productos, soluciones y servicios tecnológicos y de ciberseguridad. La multinacional, con sede central en Tokio, una de las capitales mundiales de la tecnología, ocupa la tercera posición en el ranking mundial de servicios TIC con una inversión anual aproximada en I+D de 2.800 millones de dólares. Capital analiza junto a Ángeles Delgado, presidenta de Fujitsu España, la posición de España en I+D, las carencias que posee el sector TIC en nuestro país, los avances en ciberseguridad y tecnologías de alta gama y cómo la industria tecnológica contribuye a la sostenibilidad y la igualdad.
En el sector de las TIC en nuestro país, ¿qué vulnerabilidades existen y cómo se podrían solventar?
La pandemia ha puesto de manifiesto que la tecnología está en el centro de nuestras vidas y negocios porque ha mantenido constantes las operaciones. Se ha potenciado su valor y la excelente red de comunicaciones que tenemos en España. Sin embargo, se ha notado una falta de inversión en los últimos años en tecnología. Hay una obsolescencia acumulada en infraestructuras básicas de comunicaciones, equipos remotos y planes de contingencia. Las infraestructuras básicas deben ser sólidas y se están revisando.
Otra importantísima es la ciberseguridad. Los ciberataques van en aumento y todos vamos a ser atacados en algún momento. Lo importante es cuál va a ser el impacto de este ataque y la capacidad de reacción y de contención. Además, la madurez en la utilización de los datos es muy baja en las organizaciones. Hay muchos datos, pero están dispersos. Hay que extraer de los datos inteligencia o valor para negocio. Hay que invertir más en I+D, hemos visto que nuestra inversión en I+D está muy por debajo de la media europea. Vamos a depender de la propia tecnología y es muy importante generar sistemas de confianza de la propia tecnología.
¿Es suficiente la inversión de dedicada a la investigación y al desarrollo de tecnologías en España?
Vivimos en un mundo conectado, 40.000 millones de objetos conectados y 4.500 millones de personas conectadas. Esto va a tener una aceleración muy grande a medida que se vayan desplegando las estructuras del 5G. Somos más vulnerables a los ciberataques. Creo que el hecho de conocer la criticidad de la ciberseguridad e invertir en ella ya es importante. Va a ser realmente fundamental cómo apliquemos la innovación en ciberseguridad. Con el aumento de la computación cuántica, tenemos que desarrollar nuevos algoritmos de encriptación de las comunicaciones, donde tiene que ver mucho la Inteligencia Artificial para lograr esos algoritmos.
Fujitsu tiene su origen en Japón. ¿Existen allí tecnologías y avances en Inteligencia Artificial que nosotros aquí ni hemos probado aún?
Tenemos la ventaja de pertenecer a una multinacional con origen japonés y nos permite acercar esas tecnologías. Japón es un país que invierte mucho en I+D, está al 3,5% del PIB, en España vamos a invertir el 1,4%. Hay una serie de aspectos que hacen que Japón tenga que invertir más en tecnologías, empezando por los Juegos Olímpicos. Se desarrolló tecnología para el rendimiento de los atletas extrapolable a otras áreas, las llamamos tecnologías convergentes. Japón, además, es un país en el que se producen muchos desastres naturales y en el que se han desarrollado sistemas de predicción para salvaguardar.
Otra especificidad importante de Japón, que comparte con España, es que son las poblaciones más envejecidas del mundo. Necesita atención sanitaria y cuidados sociales. Si ponemos en conjunto esa necesidad con la falta de recursos y los incrementos de coste, puede suponer presión para la sanidad pública y la solución pasa por la tecnología. Japón ha puesto en marcha un programa innovador que crea una base datos para el sistema sanitario a la que puede acceder hospitales, compañías de medicamentos, asistencia primaria y los propios ciudadanos.
Esto es algo que no existe y va a poder cambiar la forma en la que prevenimos. Nos van a permitir entender mejor, personalizar más y saber cuál será la evolución o desarrollo de una enfermedad.
Fujitsu gestiona la sanidad pública de casi la mitad de la población española, ¿el sector sanitario es víctima de muchos ciberataques?
Todos los sectores reciben ciberataques. Durante la pandemia, al tener que estar manteniendo todos los centros de datos de asistencia primaria, hemos tenido que contrarrestar ataques dirigidos exactamente igual que en bancos o industrias. Se trata de saber cuándo y cómo minimizar el impacto y reaccionar bien. El riesgo de ciberseguridad ha aumentado con el teletrabajo. Estamos dando más vías de entrada.
Las migraciones precipitadas al cloud han hecho que, a veces, se hayan migrado infraestructuras que no estaban suficientemente sólidas, desde el punto de vista de seguridad. Y una tercera área importante en la que estamos trabajando es la confluencia entre la IT (tecnología de información) y la OT (tecnología de operación). Esa superficie de ataque aumenta y tenemos que hacer aproximaciones integrales que contemplen ese marco de IT más OT. Sobre todo, en entornos energéticos e industriales.
La compañía es uno de los principales proveedores de tecnología en las Administraciones Públicas. ¿Están las administraciones lo suficientemente digitalizadas?
Hay dos puntos fuertes: la red de fibra y los servicios públicos que son absolutamente innovadores como la Agencia Tributaria, que es un éxito de servicios públicos digitales. Pero cierto es que la Administración Pública ha ido bajando mucho su nivel de inversión en tecnología desde la crisis de 2008. Tenemos una oportunidad muy grande con la entrada de fondos europeos y estamos viendo proyectos innovadores, interesantes y sumamente necesarios. Es una buena noticia porque la Administración puede recuperar un papel tractor que tuvo en su momento.
Cuando empezaron las grandes informatizaciones, la Administración Pública no solo invertía, sino que era referente. La Justicia en España tiene grandes profesionales y tenemos un buen sistema judicial, pero debe ser ágil porque tiene que responder a las necesidades de los ciudadanos y la dinámica de las empresas. La IA como soporte para los jueces, no para reemplazarlos, sino para ayudarles. Todas las tecnologías digitales las podemos poner al servicio de servicios públicos, privados y ciudadanos.
“La capacidad de influir y construir es la mayor satisfacción que uno puede tener en la vida profesional”
¿Diría que los españoles son reacios a las tecnologías del mañana o son abiertos a probar herramientas novedosas?
Depende cómo se mire. Durante estos dos últimos años, el segmento de población que más rápidamente ha adoptado el eCommerce ha sido precisamente el menos tecnológico. Las tecnologías que se vendían en los países nórdicos, menos poblados y con peores climas, siempre eran más altas de gama que en los países mediterráneos debido las costumbres sociales. Esas regiones invierten en las mejores tecnologías. Por otra parte, el sector de población maduro ha adaptado rápidamente las tecnologías.
El sector financiero español es un referente mundial en tecnología por delante de la banca europea o la americana. Hay áreas que tienen que dar un salto importante porque habían sido menos intensivos en el uso de tecnologías, como el sector manufacturero industrial, que va en camino a esa tecnología 5.0, pero no diría que adoptamos la tecnología menos que otros países.
¿El futuro de la tecnología va de la mano de la sostenibilidad y la responsabilidad ambiental?
La tecnología tiene que estar absolutamente dirigida hacia la sostenibilidad, hay que mostrar y hacer tangible cómo la tecnología contribuye a los objetivos de sostenibilidad. Un ejemplo es cómo podemos con la tecnología ayudar a reducir el consumo energético. La IA y la computación cuántica producen una reducción de consumo eléctrico de dos tercios sobre el consumo eléctrico actual.
Y en términos de igualdad social, la tecnología ayuda. Con 5G privada podemos reducir la brecha geográfica y digital y que nadie se quede atrás. Tenemos el reto de que las poblaciones pequeñas no queden aparcadas en procesos de digitalización. Existe una polémica entre personas o máquinas, y no es así, es cómo las máquinas van a complementar a las personas. La tecnología está para mejorar nuestras vidas, hacer los entornos de trabajo más seguros y tener mayor prosperidad.
Las carreras tecnológicas están fundamentalmente lideradas por hombres. ¿Por qué piensa que sucede esto realmente?, ¿se encuentra muchas mujeres con cargos de responsabilidad en el sector?
En Fujitsu tenemos un 25% de mujeres en cargos directivos, en los puestos técnicos el porcentaje es menor. Esto es, en general, una situación compleja, y los problemas complejos no tienen soluciones simples. Hay que actuar sobre varias palancas, una de ellas la propia educación y los referentes. Qué referentes les estamos poniendo a las adolescentes, creo que no suficientes en ciencia y tecnología; y cómo las atraemos hacia estas carreras. No es que haya pocas mujeres en carreras STEM, es que ha disminuido el número. La tecnología está en el centro de diseñar una nueva sociedad.
Las mujeres tienen que estar en el centro de diseñar esa nueva sociedad. Es cómo atraemos y, una vez están dentro, cómo las acompañamos a lo largo de su carrera profesional. Hemos tenido mujeres muy importantes en nuestro país visibilizando esto. Todo dirigido a hombres y mujeres, porque las acciones deben dirigirse a toda la organización. Hay una cosa que ni la empresa ni la sociedad va a sustituir que es la propia fuerza interna de las mujeres. Eso no se puede perder.
¿Qué aprendizajes saca de su puesto de dirección?, ¿han podido llegar a sentir presión en ocasiones?
La presión la siento continuamente. Este es un mercado que va muy deprisa y a un ritmo cambiante y complejo. Lo que hay que hacer no es eliminar la presión, sino aprender a gestionarla. Mi trabajo me ha dado muchísimo aprendizaje. La capacidad de aprender cosas nuevas cada día es fundamental. Me ha dado una enorme riqueza de conocer distintos países, culturas y formas de hacer.
Me he tenido que enfrentar a retos, pero las etapas más duras son, sin duda, las de mayor aprendizaje. Por encima de todo esto, a mí mi trabajo lo que me ha dado es satisfacción y capacidad de hacer cosas e influir. Siempre animo a las mujeres a que continúen avanzando en su carrera profesional, que vayan a por los puestos donde pueden influenciar más. La capacidad de influir y construir es la mayor satisfacción que uno puede tener en la vida profesional.
Fotografías: Santi Burgos
