Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Revista Capital

Gay de Liébana: "¿Han trabajado Sánchez o Macron en el mundo real? ¿Saben qué es no tener dinero a final...

Por Redacción Capital

“¿Por qué tras una larga carrera Rafa Nadal, Roger Federer y Novak Djokovic siguen en la cima? Porque estudian las estrategias de las nuevas generaciones, su afán de mejorar su juego es constante, saben transformar el estilo original y nunca dejan de perfeccionar su filosofía de campeones. No es algo tan distinto de lo que hacen Apple, Google, Microsoft o Amazon”, dice José María Gay de Liébana. De las claves para entender el atractivo de la nueva realidad se ocupa en su nuevo libro Revolución Tecnológica y Nueva Economía, que recoge buena parte de sus apuntes como profesor titular de Economía Financiera y Contabilidad en la Universidad de Barcelona. Reconocido comentarista en los medios de comunicación y pródigo en analogías entre la economía, la política y el deporte, Gay de Liébana da a Capital su visión de la actualidad político-empresarial de España y el mundo.

Causó ruido su intervención crítica en un foro de automoción con el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, que se ha acabado levantando de su silla.

Hay mucho gasto público. Y ves que cuando se levanta el ministro, se levanta media bancada. Yo me he ido solo. No es el mejor gobierno. Van a fregar a impuestos a todo el mundo. Se van a cebar con el automóvil. Es una industria potente, que tira en España y que habría que fomentar… y se la van a cargar. Si sacas el automóvil, más de un 10% del PIB te desaparece, solo directamente. Hay pueblos como Martorell que viven de Seat. Hablan del coche eléctrico. ¿Hay capacidad en el mundo para consumir tanta electricidad como para sustituir a todos los coches? No la hay. No le diga a la industria del automóvil que en 2040 no se admitirán coches, porque es una industria pesada, tiene que invertir hoy pensando en los próximos veinte años. 

¿Qué alternativa hay para la sostenibilidad?

Hay que impulsar la sostenibilidad, pero de forma adecuada. En Alemania, como tuvieron en 2018 un superávit de 44.000 millones de euros y una deuda pública del 61% del PIB, destinaron un plan de 50.000 millones de euros para costear a la gente el que hagan el tránsito en su casa de unas energías a otras. Nosotros aquí tenemos un déficit de 30.000 millones de euros y una deuda pública del 95% del PIB; por lo tanto no se puede subsidiar ni hacer nada. Vamos acumulando déficit público mientras Irlanda y Alemania tienen superávit. Existe el gasto racional y el gasto exuberante. Cuando un ministro habla y se levantan ocho detrás del ministro...

Sin embargo, está claro que hay áreas en las que hay que invertir más fondos públicos, en I+D por ejemplo, y algo habrá que sacrificar…

Sí. Te digo lo siguiente. El Real Madrid, por ejemplo, tiene una ciudad deportiva en Valdebebas. Estos clubes han creado un entorno confortable para que los aficionados los vean y los jugadores estén a gusto… Fichan jugadores para crear una capacidad de atracción. Tienen a Messi, Sergio Ramos… Si no tienes a nadie de éstos, si eres un país insípido, sin alicientes, nadie va a querer estar. Si, además, a ese mundo que está cambiando, y a los líderes que lo están cambiando, te dedicas a ponerles impuestos… te marcan en rojo, como ahora sucede con España o Francia. Hay un presidente que es Donald Trump, que fue empresario y que quebró dos veces, y se rehizo dos veces. Como es empresario, sabe lo que tiene que hacer. ¿Sánchez ha trabajado alguna vez en el mundo real? ¿Macron ha trabajado alguna vez en el mundo real? ¿Saben lo que es no tener dinero a final de mes para pagar las nóminas? A partir de aquí, todo lo que me digan carece de autenticidad. Tú subsidias y me pones impuestos; yo te respondo con aranceles, que es lo que hace Trump. Lo que tenemos que hacer es entender cómo funciona el mundo. En España invertimos 14.052 millones de euros en I+D. Amazon gastó 32.000 millones de dólares en I+D en 2019, más del doble que toda España. ¿Por qué Amazon ha pasado de facturar 232.000 millones de dólares en 2018 a 280.000 millones en 2019? Porque gasta en I+D.

De sus palabras deduzco que, quizá, Trump es el camino…

Los empresarios norteamericanos, la pequeña y mediana empresa, los accionistas de las compañías que cotizan en Wall Street, la gente que trabaja y la que no trabajaba, están encantados con él. La tasa de paro es la mas baja en la historia de EEUU (la entrevista se realizó antes de la llegada del coronavirus). Por dividendos, las compañías están pagando lo que nunca jamás habían pagado. Las empresas han visto bajar la carga fiscal sobre el impuesto de sociedades, reparten más dividendos y recompran más acciones. La gente está contenta. ¿Que hay algo de exuberancia bursátil y que en algún momento habrá una corrección? Claro que sí, pero como empresario tienes que saber por dónde puede venir esa corrección. La verdadera batalla que Trump está perdiendo es… con China. Esa batalla tiene dos frentes: uno es el de la innovación tecnológica, y el otro es el de por dónde circula la nueva tecnología. Los norteamericanos son unos cracks en innovación tecnológica, pero han dejado un poco de lado el aspecto de por dónde circula esa tecnología. El 3G, el 4G, el 5G. Todos hemos empezado copiando y, al final, resulta que se puede ser un artista. Los chinos se han metido en las redes por donde circulan todas las tecnologías. Trump tiene un problema tremendo porque, incluso en Reino Unido, Boris Johnson ha accedido a que Huawei se encargue de las redes 5G, salvo en lo que respecta a las redes de espionaje, porque se trata de una empresa participada por el Gobierno chino. Trump está con la excusa de una guerra comercial cuando el trasfondo es una guerra tecnológica. Cuando ves el ranking por capitalización bursátil de las veinte principales compañías del mundo, antes no había ninguna china, y ahora hay varias. Antes había varias europeas, y ahora están desaparecidas en combate. 

¿Quiénes serían Nadal, Federer y Djokovic en todo esto?

Microsoft estaba en el año 2000 entre las seis primeras por capitalización bursátil y en 2020 es la tercera por la entrada de Aramco. Ha tenido sus momentos, como Federer, Nadal y Djokovic, en los que a todos los que nos gusta el morbo hemos dicho que estaba acabada. Mientras tanto, Bill Gates hace un cambio. Quita a Steve Ballmer y pone a Satya Nadella, y de ahí la Nube y Azure, y las redes sociales y LinkedIn. De broma en broma van aguantando, hasta que con la nube dan de nuevo el salto. Ahora entramos en el Big Data. Necesitas a alguien que tenga estas cualidades, estas formaciones, que viva por aquí, para cubrir un puesto de trabajo. Pues a través del Big Data y el análisis de las redes sociales, por la tarde te digo cuatro candidatos. Este es el poder tecnológico. Es el nuevo oro negro, el nuevo petróleo.

¿Las tecnológicas siguen siendo lo más poderoso que hay en el mundo?

Hoy sí. En el año 2020 sí, en el año 2021 creo que sí, y en el año 2022, no tengo ni puñetera idea de lo que va a pasar. Estamos ante una imprevisibilidad… que yo no sé lo que va a pasar. Igual vemos una empresa de automoción que rompe los esquemas dentro de un par de años y trae el coche autómata, con el que uno no tendrá que hacer nada. 

En su libro habla de algo que tiene todo lo que triunfa: el atractivo de la nueva realidad.

Es el encanto de estas compañías como Alphabet, Microsoft, Apple, Facebook, que tienen un gancho especial. Son atractivas, hay mucho dinero, no hay activos que no sirvan para nada. Las cuentas tienen una estructura de gastos adecuada, moderada, liviana. Se gana mucho dinero, se reparte mucho dinero a los accionistas, a diferencia de lo que vemos en la Europa tradicional. Hay empresas que tradicionalmente han ido maquillando números, pero no es el caso de éstas.

¿Cuán lejos están de esa situación el Ibex y el español medio?

La mentalidad del español medio es que el Estado me dé cada vez más cosas. En Silicon Valley no he visto ninguna manifestación en pro de un salario mínimo, ni de las pensiones, ni de la sanidad pública, ni de nada. Allí hay otra mentalidad. El que trabaja y se gana la vida, se lo paga, y el que no, que se fastidie. Aquí tenemos un problema. Cuando ves la composición del Ibex 35, con todo el respeto de las compañías, desde los años 90 son mayormente las mismas. En 2013, Amazon facturaba 75.000 millones de dólares y en 2019, 280.000 millones de dólares. El conjunto del Ibex 35 facturaba 388.000 millones en 2015 y en 2018, 393.000 millones. Prácticamente igual. ¿Qué nos ha faltado? Punch empresarial, innovación, empuje, no hay mentalidad de ir a más. La gente, al no tener estímulos porque el Estado le da cada vez más, tiene cada vez menos iniciativa. Por ejemplo, la República Checa tiene la tasa de paro más baja de toda Europa. Yo he estado allí, he dado una conferencia en Praga; la di en español, la tradujeron, no hubo ningún problema. Mientras daba la conferencia en el hotel hubo algo que me llamó la atención, y es que estaba lleno de camareros y cocineros escuchándome. Me quedé sorprendido. Al acabar tengo la oportunidad de hablar con alguno de ellos. Le pregunto: ¿usted entiende español? Me dice que sí. Y que le parecía interesante porque por las tardes estudiaba economía y que trabajaba además en el hotel. Otro, que estudiaba ingeniería. Otro, hostelería. Estudiaban y trabajaban, y nadie hablaba de SMI ni nada. ¿Por qué? Porque en Praga, hace unas décadas, los tanques rusos estaban entrando. Estos chavales saben por boca de sus padres lo que es pasar hambre y miseria, y dicen, esto no me va a pillar. Esos son los países emergentes, donde hay una clase media que va a más.

Dice que en España no hay líderes…

Vamos a poner a Juan Roig o Amancio Ortega paseando por la Gran Vía. Vamos a poner luego a CR7 o Messi paseando, y veremos lo que pasa. Cuéntase que en alguna ocasión el CEO de una gran compañía tecnológica, Sundar Pichai (Google), que es un loco del fútbol, visitó el Barça y tenía una gran ilusión por ver a los astros. Tuvo la oportunidad de estrechar la mano con los futbolistas. En la intimidad, ese CEO preguntó cuánto ganaban los jugadores. Cuarenta millones de euros, le dijeron. El CEO se quedó atónito. ¿Cuarenta millones? Pero si yo tengo un sueldo neto libre de impuestos de 100 millones de dólares. Esta es la diferencia entre España y EEUU. Los ídolos son aquellos. Cuando aquí habla el CEO de una tecnológica, no va nadie. Warren Buffett, en su discurso a los accionistas, congrega en su pueblo, Omaha, a 50.000 personas cada año, diciendo mensajes muy profundos. Por ejemplo: “Solo invierto en lo que entiendo. Primera recomendación básica: no perder dinero. Segunda recomendación básica: no olvidar nunca la primera recomendación. Tercera, si no sabes dónde invertir, tenlo en el bolsillo. Otra, siempre gasta menos de lo que ingresas”. Y la gente se da de bruces para estar allí con Buffett. Aquí, hablo por experiencia propia, para un Premio Nobel, en la Facultad de Economía, tenemos que meter a los alumnos empujándolos; decirles que premiaremos su asistencia en la nota final. Cuando se trata del presidente del Barça, desborda la Universidad. Tenemos cracks como Juan Roig, Amancio Ortega, Víctor Grifols, empresarios que no viven del BOE, pero que son líderes de aquí, y ni puñetero caso.  

Entrevista publicada en el número de marzo de 2020 la Revista Capital.

Únete a nuestra Newsletter

A través de nuestra Newsletter con Capital te hacemos llegar lo más importante que ocurre en el mundo de la #economía, los #negocios, las #empresas, etc… Desde las últimas noticias hasta un resumen con toda la información más relevante al final del día, con toda comodidad.