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Directivos

Manuel Muñiz (España Global): "España se percibe a sí mismo peor que en el extranjero"

Por Redacción Capital

Manuel Muñiz llegó a la Secretaría de Estado de España Global [antigua Marca España] en enero de 2020, semanas antes de que estallase la pandemia a nivel mundial y al tiempo que se ampliaron las competencias de este organismo del Estado. A las labores ya tradicionales de reputación de país, se añadieron las de la Dirección General de Diplomacia Económica, la Dirección General de Estrategia y la Dirección General de Comunicación. Sobrevivió. Ahora, ya asentado, explica a Capital cómo se ve a España en el exterior en este crucial momento.

¿Cómo agasaja España en un encuentro bilateral? ¿Cuánto cuesta la promoción española en el exterior?

La Secretaría de Estado cuenta actualmente con un presupuesto de unos 13 millones de euros para este año. Pero hay que destacar que la reputación país es un esfuerzo colectivo. Por ejemplo, en la campaña de Spain for sure, empresas como Aena, Adif o Iberia nos ayudan a difundirla voluntariamente. Además, el año pasado participaron una docena de embajadores honorarios como Rafa Nadal, Ana Botín o Fernando Alonso. Todos lo hicieron voluntariamente. Si esto se tuviese que tasar sería imposible asumir tal gasto por parte de ningún actor público ni privado. Sin embargo, estas campañas las construimos mediante colaboración, que es como se debe construir la reputación de un país.

¿Se ha empañado la imagen y la reputación de España con la gestión de la Covid-19?

Nosotros no notamos que haya caído la imagen del país en el exterior. La pandemia es algo global que ha golpeado a todos los países del mundo y que ha supuesto un reto enorme de gestión a los mejores sistemas sanitarios y administrativos del mundo. El problema es que en España hemos tenido la tendencia insana de juzgar la gestión de nuestro país en los picos de la pandemia, cuando estábamos en los peores momentos. Hoy en día esta pregunta no nos la hacemos, pero hay que destacar que tanto en Alemania como en Francia también se ha planteado. Lo que tenemos que tener es un fuerte sentido de la empatía, de la comprensión de un problema que ha sido muy complejo tanto para nosotros mismos como para con los demás.

Se lo decimos porque los ataques políticos influyen en la imagen pública y vivimos en una etapa de máxima polarización y crispación. De hecho, ha llegado a decir que no moderar la polarización política sería un “fracaso”. ¿Hemos fracasado? ¿Son nuestros propios políticos los peores embajadores de la Marca España?

Esto tiene mucha más incidencia en la percepción doméstica interna que tenemos los españoles que en el exterior. A mi modo de ver y según los informes, España es uno de los países del mundo que se perciben a sí mismo peor que en el extranjero. Hay un 14% de diferencia entre la percepción interna y la externa. Y esto pasa en países que se cuentan con los dedos de una mano.

Creo que uno de los factores que produce este fenómeno es la agresividad del debate político público y el hecho de que se instrumentalice el debate con la imagen del país para atacar o deslegitimar a aquellos que en ese momento están ocupando las instituciones, pero quiero recordar a la gente que este dibujo de España no es real. Todos los estudios dicen que España tiene una imagen exterior super potente y se nos ve como una super potencia.

En ese caso, ¿no sería más práctico cambiar primero la percepción interna antes de lanzarse a mejorar la externa?

Hemos hecho campañas que juegan con estas dimensiones. Por eso, en la segunda campaña de Spain for sure personalidades internacionales nos dicen que España es su hogar, como el Cholo Simeone, entrenador del Atlético de Madrid, que explica por qué se desarrolla aquí la élite del fútbol. Este tipo de mensajes son importantes en todos los países de origen de estas personas y esto es importante para nosotros. España es un imán de talento, de una acogida de diversidad enorme y de gente talentosa que viene aquí a hacer su vida.

Puede ser un imán de talento internacional, pero cabe destacar que, por ejemplo, y citamos sólo uno de los casos existentes en muchos sectores, según la Organización Médica Colegial (OMC), entre 2011 y 2019 emigraron 12.000 profesionales de la medicina ante la falta de oportunidades. Y sobra decir que este pasado año la sanidad ha sido un pilar para nuestro país…

No conozco la cifra de médicos, pero sí que tenemos capacidad de atraer talento. Aparecemos en todas las encuestas como uno de los países más atractivos para la gente para instaurarse y vivir. Este mensaje tenemos que mandarlo hacia dentro y hacia fuera. No hay que autocomplacerse. En España tenemos gestiones que hay que mejorar y tenemos muchos frentes que continuar mejorando, pero el punto de partida no debe ser esa crítica tan severa y tan alejada de la que tienen los otros de nosotros. Este mensaje es fundamental y creo que la imagen de España la cuidamos entre todos y es un mensaje de responsabilidad que quiero lanzar desde que estoy en este cargo.

¿Es buena para la recuperación del turismo la imagen de jóvenes en Madrid o en Barcelona aglutinados en calles y playas sin mascarillas y saltándose las medidas de seguridad?

Sí… [suspira]. Ha habido escenas parecidas en otras partes del mundo, pero por lo general la gente es responsable. Tenemos todos los días un resumen internacional de prensa y, en un mar de noticias globales, esto es anecdótico. Pensemos que en los últimos años han venido a España… ¿cuántas personas? ¿700 millones? A esta gente no le va a cambiar la imagen de país por estos titulares sobre las imágenes en las playas. De nuevo creo que hay que vivir este debate con más sosiego. La imagen se construye con mucha más tranquilidad y haciendo las cosas bien.

Ya que esto es anecdótico, escalemos a un tema que afecta a esta Secretaría y a las relaciones de España en el exterior. ¿Cómo ha influido el Brexit y la cuestión de Gibraltar en las relaciones de ambos?

Desde el primer momento sabemos que es muy difícil extraer una lectura positiva del Brexit en términos generales. Hubiera sido deseable que no se hubiese producido. Ahora, siendo conscientes de que hay que respetar al pueblo británico, el acuerdo que alcanzamos creemos que es positivo y nos permite construir una relación fuerte de interdependencia. En Gibraltar se ha alcanzado un preacuerdo que se debe aprobar por ambas partes y que consideramos que es positivo porque atiende a la interdependencia de Gibraltar y España. Las bases se han asentado para la relación con Reino Unido son positivas y constructivas. Y esto tampoco estaba garantizado. Era uno de los riesgos a los que nos enfrentamos cuando se expuso un Brexit más duro que hubiese sido mucho más dañino para nuestra economía.

Sobre economía y diplomacia económica. En esta agenda buscan que por cada euro de dinero público invertido haya una parta de inversión internacional. ¿En qué porcentaje? ¿De qué tipo?

Por cuatro o cinco de inversión privada. Ese es el apalancamiento de movilización de recursos que se quiere producir. La parte que le concierne a Exteriores es facilitar que los inversores internacionales vean la oportunidad que supone en este momento invertir en España porque somos uno de los países que más va a crecer en la Unión Europea en los próximos años. Somos uno de los grandes beneficiarios de los fondos europeos de recuperación y resiliencia, que no es un tema menor porque nos corresponden 140.000 millones y es un volumen que acerca a España a ser uno de los principales perceptores netos comunitarios. Es un volumen enorme y el mensaje que estamos trasladando a terceros es que es una buena oportunidad para invertir en España. Va a haber una inversión muy importante de infraestructuras en capital humano, de tantísima inversión en la economía popular, en la digital, en la tecnológica y en la de sectores altamente productivos. España es una vía de entrada al mercado europeo y la reacción que nos estamos encontrando con las contrapartes en nuestros viajes ha sido muy positiva.

España se ha apoyado mucho en el fondo de recuperación europeo para su ‘renacimiento’. ¿Qué ocurriría si dentro de dos años la acción garantizada del BCE desaparece por el incumplimiento de alguno de los puntos del proyecto?

El BCE es muy activo en política monetaria y esto ha permitido afrontar la crisis sanitaria con factores económicos y expansivos importantes. España ha aprobado planes de sostenibilidad y estímulo por algo superior al 20% del PIB. Esto no ha derivado en un mayor coste de financiación de la deuda por muchos motivos, pero creo que es porque el BCE ha tenido una política monetaria expansiva y esto es muy positivo. Tanto, que ha permitido a España, tanto en esto como en política presupuestaria y fiscal, responder adecuadamente a la crisis.

Ahora mismo la actitud de todos los países de la Unión Europea, y a mí no me consta de ninguno a nivel internacional, es invertir, movilizar recursos y hacer una política para reducir el impacto de la crisis en el PIB y no destruir tejido competitivo que no debería verse dañado por problemas puntuales de liquidez o de falta de actividad. En estos momentos la actitud es de implantar planes potentes de actividad económica.

En España preocupa especialmente la recuperación de las pequeñas empresas. Tanto a grandes como a no tan grandes, ¿cómo ayuda España Global a la internacionalización de las empresas españolas?

Hemos sido muy activos en la movilidad de la plataforma Conecta, que está dirigida a las empresas que se quieren desplazar internacionalmente, y lo que hace es una línea de información sobre los requisitos de terceros países de llegada a empresas españolas. Estamos en iniciativas de movilidad vitales para la propia actividad empresarial. Además, desde España Global también llevamos la agenda de viajes de Presidencia. Trabajamos conjuntamente en todos estos viajes para que haya una interlocución con las contrapartes cuando es de utilidad y a nivel empresarial cuando hay una oportunidad.

La tasa Google ha empezado a pagarse este abril. ¿Está afectando en las relaciones con EE.UU. o la llegada de la administración Biden se presiente esperanzadora?

Todo parece indicar que quieren tener un acuerdo en el seno de la OCDE en la actividad digital. España defiende desde el principio la posibilidad de reservarnos el derecho de poner una tasa digital unilateralmente por su soberanía fiscal, pero lo que siempre hemos dicho es que lo que nosotros queremos es que haya un marco multilateral de fiscalidad en la actividad digital. En este marco la Administración de Estados Unidos se ha mostrado positiva. Así España pasaría a regirse por el marco multilateral establecido por la OCDE. Había una cláusula problemática sobre el planteamiento de base que había hecho la Administración saliente estadounidense, pero la entrante ya ha dicho que quiere retirar la exigencia que implicaba que las multinacionales tecnológicas pudiesen elegir la jurisdicción a la que se querían someter. Somos optimistas sobre el provenir de esta negociación.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, reconoció en el debate sobre el Estado de la UE de septiembre de 2020 que Europa había llegado tarde a la competición tecnológica y había perdido la soberanía sobre los datos personales de su propia población. ¿Está de acuerdo?

Europa en algunos campos estratégicos tiene una competencia fuerte por parte de empresas norteamericanas muy dura y tenemos espacio para mejorar. Hay que completar el mercado digital común y tenemos que tener empresas tecnológicas que sean líderes en sectores estratégicos como el 5G, en la nube o en la Inteligencia Artificial, donde hay más inversión en Europa que en China. No veo nada estructural que impida que Europa lidere en todos estos campos.

La digitalización va a ser la palabra del año…

La digitalización y la economía verde van a ser los dos grandes puntales de la recuperación, y deben serlo porque son los sectores que conectan sostenibilidad, competitividad y productividad. Además, hay consenso en este aspecto, a diferencia de lo que vimos en 2008 y 2009, cuando hubo una gran discrepancia en cómo salir de la crisis. Ahora mismo hay un consenso global de que tenemos que hacer una fuerte transición económica y pasar a una economía digital y más verde. Y este no es un tema menor. Luego habrá diferencias en la implementación en detalle, pero el consenso está ahí.

¿2021 es también esperanzador? Al menos en materia económica el informe bianual ‘Perspectiva Económica Mundial’ del Fondo Monetario Internacional (FMI) se mostró optimista con las proyecciones de crecimiento y reparación al estimar que España crecerá este año un 6,4% este año, cinco décimas más que en su anterior previsión.

Esto demuestra que cuando viajamos por el mundo y hablamos con los interlocutores y les preguntamos por los países atractivos para inversión internacional, España está entre los primeros de la lista por su gran capacidad de inversión y avance hacia una economía mucho más competitiva. Esto lo reflejan las cifras de crecimiento. Vamos a estar a la cabeza de la eurozona, lo confirman todas las estimaciones que se están haciendo.

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