La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) representa a dos millones de empresas y autónomos de todos los ámbitos de actividad, e integra tanto al sector público como al privado. Fundada en 1977, centra su labor en la representación voluntaria y ayudas a los empresarios mediante la vinculación de más de 4.500 asociaciones. Capital conversa con Inmaculada de Benito, directora de Turismo, Cultura y Deporte de la CEOE, para analizar el panorama actual del turismo y sus previsiones futuras. Aborda temas del auge de la digitalización y la necesidad de homogeneización de la normativa para la práctica del turismo, entre otros.
¿Cómo se puede reforzar la cadena de valor del turismo?
La pandemia ha acelerado algunos problemas endémicos que tenía el sector. Esos problemas van a ser más fáciles de resolver por la aceleración de las soluciones y por la mayor sensibilidad, al igual que los procesos vinculados a la economía circular y al desarrollo sostenible. Sin turismo, no hay ni economía ni circularidad. Van a llegar 140.000 millones para ese impulso de la economía, en la que el sector turístico, con independencia de los 3.400 millones que llegan específicamente para la recuperación de destinos, tiene que jugar un papel fundamental. Las empresas necesitan contar con compensaciones a corto plazo que puedan ayudarlas a operar y a recuperar solvencia para poder seguir siendo competitivas en el futuro.
Uno de los objetivos de la CEOE es el desarrollo de propuestas para la homogeneización y simplificación de la normativa reguladora en el turismo, ¿es esto posible si cada comunidad autónoma tiene sus propias restricciones?
Es un problema, al haber 17 comunidades autónomas con 17 normativas diferentes no hay homogeneización y esto no garantiza la confianza. A la in[1]certidumbre nacional, añadimos un efecto multiplicador de incertidumbre jurídica. Hemos estado solicitando una homogeneización a nivel europeo, para garantizar esa confianza y recuperar la normalidad. Esa misma solicitud la hacemos ahora a nivel nacional, pedimos que se aplique el sentido común y se res[1]pete la sanidad como primer objetivo. Es muy importante, además, trasladar que las empresas han hecho un esfuerzo ímprobo para garantizar la seguridad, tenemos que ayudar a que se reconozca socialmente.
La digitalización empresarial en el turismo, ¿aumenta o reduce costes?
La tecnología es un facilitador. Tiene que servir para dos cosas. Una, para optimizar los ingresos, y otra, para la reducción de costes. Es aquí donde nos tienen que ayudar a que ambos procesos emerjan y se puedan producir de forma simultánea. La mejora de los ingresos nos permite llegar a un mayor número de turistas de una forma más ágil. La reducción de costes, por su parte, reduce y simplifica los procesos, los convierte en más accesibles. Ahora tenemos que ver si, con las ayudas que van a llegar, con el Plan de Digitalización de España y con la mejora de la digitalización de las pymes seremos capaces de que la tecnología fluya de las dos maneras.
¿Cómo afrontan la digitalización las empresas turísticas que no disponen de los recursos económicos para implantarla?
Está previsto un Plan de Digitalización a nivel nacional que está enfocado en todas las empresas existentes en la categoría de pymes. El tema de los fondos es una legislación muy compleja, que se rige por unos parámetros europeos y que no todas las empresas están en situación de poder entender. Desde CEOE con Europa tenemos una plataforma que permite contar con toda la información y con alertas que permiten saber cuáles son las ayudas que están llegando en cada momento y que estas sean universales.
Tanto los empleados, como los clientes, ¿están correctamente formados para manejar la digitalización?
Para la formación, probablemente no lo estaban. Sí que es verdad que por esta parte está habiendo muchos recursos para que se produzca esa actualización de capacidades y habilidades para poder estar formados. Es uno de los gran[1]des retos que tenemos, que realmente esos recursos lleguen a los colectivos a los que tienen que llegar y que se apliquen adecuadamente. El Departamento de Formación de CEOE está haciendo un trabajo extraordinario para conseguir el equilibrio entre lo que hay y lo que tiene que llegar. Hay cosas que ya no van a volver a ser como antes, hay procesos que se van a transformar por sí mismos como una metamorfosis. Para que se pueda desarrollar adecuadamente, necesitamos actualizar las capacidades.
¿Qué recomendaciones da la CEOE para el futuro del turismo?
Tenemos que llegar a esa transformación con ayudas, celeridad, el certificado europeo y una movilidad que sea transparente y lo menos restrictiva posible. Y que vaya acompasada con los ritmos de vacunación y la protección del empleo. Desde la Fundación CEOE se está impulsando el Plan Sumamos, que involucra a las mutuas para que puedan vacunar desde las empresas. La vacunación es siempre del Gobierno, pero necesitamos que haya empresas turísticas, concretamente, que puedan planificar esas vacunaciones. Sigue sin haber claridad en cómo van a llegar esas ayudas a las empresas, hay unas líneas maestras que tienen que venir acompañadas de más transparencia, agilidad y flexibilidad.
¿El certificado de vacunación será clave para la reactivación del turismo inter[1]nacional?
Por supuesto, volvemos a la homogeneidad, que los criterios que se apliquen en función de unos determinados parámetros puedan ir ligados al número de contagios o al de decesos. Para nosotros, están incorporados Reino Unido, Alemania o Francia, que están muy cercanos a nosotros como lugar de vacaciones y tenemos que mirarlos de esa manera. Influye muchísimo este crecimiento también a nivel europeo y todos los acuerdos bilaterales a los que podamos llegar des[1]de España con esos países emisores con los que normalmente operamos.
Como directora de Turismo, Cultura y Deporte, ¿cómo ha afectado al turismo que no hubiese público en eventos deportivos?
Las restricciones en la movilidad han impedido que se celebren eventos deportivos o se visiten iconos culturales. Eso ha convertido las vacaciones en un tema prácticamente imposible. Hay que volver a esa normalidad con responsabilidad, estamos en medio de una pandemia y debemos ser cautos y no ser extremistas. Tiene que haber criterios objetivos, ha habido situaciones en las que la movilidad era posible, pero no había nada que hacer, por lo que la gente no viajaba. Viajar significa tener una experiencia vital diferente, es fundamental acompasar las decisiones de apertura de la movilidad con la de otras actividades.
La Fundación CEOE enfatiza la promoción del espíritu empresarial entre los jóvenes, ¿qué previsiones hay para el empleo juvenil en el turismo?
Existe un envejecimiento de la población, y la extensión de la vida laboral va en contra de la incorporación de los jóvenes al empleo. El sector turístico es uno de los más jóvenes que tenemos, los jóvenes deben insertarse en la vida laboral del turismo cuanto antes, para adquirir esa experiencia y aportar valor. El talento joven y el senior, juntos, hacen que las empresas sean productivas. Los jóvenes son nativos tecnológicos y digitales, ahora hay trabajadores nómadas que no tienen que residir en el mismo lugar donde desarrollan su actividad. La evolución que ha habido puede potenciar la actividad turística, ha promulgado y mejora[1]do la actividad e incentivado la mejora de la competitividad.
