Este martes, los Veintisiete han decidido eliminar a Antigua y Barbuda de su lista 'negra' de paraísos fiscales, lo que reduce dicha lista a once jurisdicciones que la Unión Europea considera no cooperativas en términos fiscales. A pesar de que la Comisión Europea retiró a Panamá de su listado de terceros países de alto riesgo para el sistema financiero de la UE, este país sigue figurando en la lista.
La lista de la UE se compone de países que no han mantenido un diálogo constructivo sobre gobernanza fiscal o que no han cumplido con los compromisos de implementar las reformas necesarias. Estos países deben trabajar para cumplir con un conjunto de criterios objetivos de buena gobernanza tributaria, como la transparencia, la tributación equitativa y la adopción de estándares internacionales para prevenir la erosión de la base imponible y el traslado de beneficios.
Con los cambios introducidos este martes, la lista de jurisdicciones no cooperativas a efectos fiscales se reduce a once integrantes: Anguila, Fiyi, Guam, Palaos, Islas Vírgenes de Estados Unidos, Samoa, Samoa Americana, Panamá, Rusia, Trinidad y Tobago y Vanuatu.
Antigua y Barbuda fue incluida en la lista 'negra' de la UE de jurisdicciones no cooperativas a efectos fiscales en octubre de 2023, tras una evaluación negativa del Foro Global de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) con respecto al intercambio de información previa solicitud.
A raíz de los cambios en las normas aplicables en Antigua y Barbuda, el Foro Global le ha concedido una revisión complementaria, que se llevará a cabo en un futuro próximo, a la espera del resultado definitivo.
La lista de la UE de jurisdicciones no cooperativas a efectos fiscales se estableció en diciembre de 2017 y forma parte de la estrategia exterior de la UE en materia fiscal con el objetivo de contribuir a los esfuerzos en curso para promover la buena gobernanza fiscal en todo el mundo.
¿Qué es un paraíso fiscal?
Un paraíso fiscal es un territorio o país que ofrece condiciones favorables para personas y empresas extranjeras con el objetivo de atraer capital.
Los paraísos fiscales son utilizados a menudo para evadir impuestos o esconder activos de las autoridades fiscales de otros países. Sin embargo, también pueden usarse de forma legítima para la planificación fiscal o para gestionar fondos internacionales de manera eficiente.