Un reciente estudio elaborado por la consultora Oliver Wyman, en colaboración con el Banco Mundial y Women Political Leaders, destaca que el PIB global podría crecer más de un 20% en los próximos diez años si las mujeres contaran con las mismas oportunidades económicas y políticas que los hombres. Este informe, titulado ‘Representation Matters’, examina la vital relación entre la representación femenina en la política y el desarrollo económico.
El informe subraya que España se posiciona como líder en esta tendencia, con un 52% de representación femenina en el Gobierno, cifra que supera la media europea. Se señala que la participación activa de las mujeres en la política es fundamental para el crecimiento económico y la reducción de la desigualdad. Sin embargo, a pesar de componer la mitad de la población mundial, las mujeres todavía enfrentan numerosas barreras que limitan su acceso a posiciones de liderazgo.
Actualmente, las mujeres ganan en promedio solo el 80% de lo que perciben los hombres y poseen menos de dos tercios de los derechos legales que ellos. Además, las oportunidades laborales siguen restringidas y, en muchos países, el avance en la equidad de género ha retrocedido. El estudio destaca que la equidad de género en la política es un imperativo de justicia social y una estrategia crucial para el crecimiento económico global.
Cuando las mujeres acceden a posiciones de liderazgo en política y economía, el crecimiento se acelera y las sociedades se fortalecen
En cuanto a la situación en España, el país cuenta con una puntuación de 90 sobre 100 en el índice de equidad de género, superando notablemente la media europea de 82. El Congreso, por ejemplo, tiene un 44% de diputadas, mientras que el Senado cuenta con un 42% de representación femenina. Sin embargo, a nivel global, las mujeres siguen subrepresentadas, con solo un 26% de los escaños parlamentarios ocupados por ellas y un 23% en cargos ministeriales.
El informe identifica barreras significativas que obstaculizan el avance de las mujeres en la política, como la falta de igualdad de oportunidades y protecciones legales. Solo el 55% de los países han aprobado leyes contra la violencia doméstica, y menos de la mitad ofrece apoyo financiero para el cuidado infantil, un aspecto esencial para permitir la participación femenina en la vida pública.
Ante la situación actual, el estudio propone la implementación de cuotas de género en parlamentos y partidos, la aprobación de leyes contra el acoso político de género y la creación de programas de financiamiento que faciliten la participación de las mujeres en la política. También se aboga por reformas legales que eliminen las barreras que dificultan el acceso de las mujeres al mercado laboral, garantizando condiciones de igualdad salarial y el fortalecimiento de los derechos de maternidad y paternidad.
Garantizar la representación femenina en la toma de decisiones es una condición indispensable para lograr un desarrollo sostenible y una economía global más fuerte
En conclusión, el informe recalca la importancia de promover la equidad de género no solo como un principio de justicia, sino como una palanca clave para el progreso económico y social, haciendo un llamado urgente a todos los sectores de la sociedad para que trabajen en conjunto hacia la eliminación de estas desigualdades.
