El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, ha indicado una posible expansión del modelo de exportación de semiconductores para inteligencia artificial (IA) a otros sectores. Este enfoque, previamente acordado por Nvidia y AMD, contempla ceder al Gobierno el 15% de los ingresos obtenidos en China. Bessent señaló en una entrevista con Bloomberg Surveillance que esta estrategia podría ampliarse, dado que ahora poseen un modelo y una prueba beta.
Un modelo único para la expansión en China
Según fuentes como Financial Times y The New York Times, Nvidia y AMD han acordado este singular modelo como parte de un pacto con la Administración Trump para asegurar licencias de exportación. Nvidia se comprometió a compartir un 15% de los ingresos generados por la venta de chips H2O en China, mientras que AMD hará lo propio con sus chips MI308. Bessent afirmó que esta solución única permite la expansión de Nvidia en China, al tiempo que los contribuyentes estadounidenses también se benefician.
Bessent minimizó preocupaciones sobre la seguridad nacional en exportaciones a China, mencionando que el gobierno de Estados Unidos no desea que el estándar global de la industria sea de origen chino. A su vez, indicó que hay informaciones sobre el interés de China en que sus empresas prioricen procesadores nacionales sobre los de Nvidia.
Washington maneja informaciones sobre el interés de Pekín en que las empresas chinas ignoren los microprocesadores de Nvidia
Fuentes del Financial Times señalan que reguladores chinos han solicitado a las empresas tecnológicas que justifiquen el uso de chips H2O de Nvidia en lugar de alternativas locales.
La respuesta de China y el auge de fabricantes nacionales
Pekín ha comenzado a impulsar alternativas nacionales a las soluciones de Nvidia. Los fabricantes chinos, con Huawei a la cabeza, han aumentado su cuota de mercado tras las restricciones impuestas a H2O de Nvidia. El pasado mes de julio, la Administración del Ciberespacio de China exigió a Nvidia aclaraciones sobre los posibles riesgos de seguridad de sus chips H20, incluidos posibles «backdoors». Esta medida es parte de un esfuerzo más amplio para garantizar la seguridad y el control tecnológico dentro de sus fronteras empleando tecnología nacional.
