El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha manifestado su disposición a reducir el arancel del 20% que se aplica a las importaciones provenientes de China, relacionadas con el fentanilo. Estas declaraciones se realizaron un día antes de su esperado encuentro con el presidente chino, Xi Jinping. Trump esperaba abordar diversos temas, entre ellos la tecnología, y mencionó específicamente los chips para inteligencia artificial (IA) de la empresa Nvidia.
«Sí, espero reducir esa cifra porque creo que nos ayudarán con el problema del fentanilo. Harán todo lo posible», comentó Trump al ser preguntado sobre la posible rebaja del arancel del 20%. Sin embargo, no ofreció detalles adicionales sobre la reducción del arancel. Además, Trump expresó su optimismo en resolver las tensiones comerciales relacionadas con las tierras raras y las restricciones de exportación impuestas por Pekín.
«Aún no hemos hablado de plazos, pero encontraremos una solución. Como saben, nos está yendo muy bien con las tierras raras. Y creo que daremos un gran paso adelante con el fentanilo», añadió el presidente estadounidense, señalando que espera evitar la imposición de nuevos aranceles.
En otro orden de ideas, Trump confirmó que planea discutir con Xi Jinping sobre Blackwell, el modelo de infraestructura de IA de Nvidia. Calificó el avance tecnológico como «increíble», aseverando que el país está diez años por delante de cualquier otro en el ámbito de los microprocesadores de alta tecnología.
La reducción de aranceles podría estar sobre la mesa, pues según ‘The Wall Street Journal’, Estados Unidos está considerando disminuir a la mitad los aranceles del 20% sobre las exportaciones chinas relacionadas con el fentanilo. A cambio, se espera que Pekín endurezca las restricciones sobre los productos químicos utilizados para producir el fentanilo.
Esta reunión será el primer encuentro presencial entre los dos líderes desde el retorno de Trump a la Casa Blanca en enero. El contexto, marcado por renovadas tensiones comerciales, se intensifica mientras se acerca la expiración, el 10 de noviembre, de la tregua que puso un alto a la guerra comercial anterior.
