El último informe elaborado por ATA revela que el 96,5% de los nuevos autónomos en España desde 2021 son extranjeros. En total, se han sumado 108.155 nuevos trabajadores al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), de los cuales 104.338 corresponden a emprendedores de origen foráneo. La Comunidad Valenciana lidera este crecimiento, con un incremento de 22.391 autónomos extranjeros, seguido por Cataluña con 21.046 y Andalucía con 15.509.
En el contexto nacional, han aumentado los autónomos extranjeros en 17 de las 19 comunidades autónomas. Sin embargo, Ceuta y Melilla han experimentado un descenso tanto en el número de autónomos españoles como extranjeros. Nueve comunidades, como Aragón y Asturias, han visto caer su cifra de cotizantes al RETA, principalmente entre los empresarios de nacionalidad española.
Los datos son contundentes: el colectivo de autónomos extranjeros se ha convertido en un pilar fundamental para el crecimiento del RETA en los últimos cuatro años
A pesar del aumento de los autónomos foráneos, este crecimiento no ha sido suficiente para revertir la tendencia negativa en algunas comunidades. En el caso de Andalucía, aunque se han sumado 17.963 autónomos españoles, el crecimiento de los foráneos sigue siendo significativo. En la mayoría de las comunidades donde ambos grupos han crecido, el aumento de los autónomos extranjeros ha sido notablemente mayor.
El informe también indica que en todos los sectores se ha registrado un fuerte aumento de autónomos extranjeros en los últimos cuatro años, destacándose la construcción (+17.446), las actividades profesionales, científicas y técnicas (+13.906) y la hostelería (+12.670). Por el contrario, el comercio ha sufrido una pérdida significativa de autónomos españoles, con una disminución de 50.047, mientras que ha sumado 7.955 foráneos, lo que no ha sido suficiente para evitar una caída total en el RETA.
En conclusión, el crecimiento de los autónomos extranjeros se ha consolidado como un elemento clave en la economía española, aportando dinamismo y vitalidad al tejido productivo del país.
España suma 15.400 nuevos autónomos hasta abril, a pesar de la caída en comercio y transporte
