Iberdrola, a través de su filial Avangrid, ha alcanzado un hito significativo al generar unos 13.000 gigavatios hora (GWh) de energía en Estados Unidos durante el primer semestre del año. Esta cantidad de electricidad es suficiente para abastecer a aproximadamente 2,4 millones de hogares en el país. La compañía, presidida por Ignacio Sánchez Galán, opera un total de 80 instalaciones eléctricas que suman más de 10,5 gigavatios (GW) de capacidad de generación de costa a costa en Estados Unidos.
A principios de este año, Avangrid anunció la puesta en marcha de tres nuevos proyectos solares en Texas, California y Ohio. Estos proyectos aportan alrededor de 600 megavatios (MW) de nueva capacidad, lo cual ha permitido un incremento del 125% en la producción de energía solar de la compañía en comparación con el primer semestre de 2024. Según informes de la empresa, desde 2015, Avangrid ha mejorado su capacidad de generación en un 66%.
La energía generada por su creciente cartera de proyectos demuestra el reconocimiento de la compañía de las necesidades energéticas críticas de Estados Unidos y su compromiso con inversiones que proporcionen energía fiable y asequible a hogares y empresas estadounidenses
Además, Iberdrola, a través de Avangrid, gestiona actualmente 10 proyectos que suministran más de 1,5 GW de energía a centros de datos y empresas líderes en tecnología e inteligencia artificial en Estados Unidos. Cinco proyectos adicionales se encuentran en construcción, los cuales agregarán casi 700 MW a su capacidad, para ayudar a estas empresas a satisfacer sus necesidades energéticas urgentes.
En marzo, Iberdrola reafirmó su compromiso con el mercado estadounidense al anunciar una inversión planificada de más de 20.000 millones de dólares a 2030 en infraestructuras de redes. Esta apuesta estratégica incluye una ampliación de capital cerrada en julio por valor de 5.000 millones de euros, destinada principalmente a acelerar el crecimiento en redes eléctricas en Estados Unidos y Reino Unido. Con esta estrategia, Iberdrola anticipa que su base de activos en redes podrá superar los 90.000 millones de euros en 2031, en comparación con los 30.000 millones de 2020, multiplicando casi por tres su tamaño en solo una década.
