Los fabricantes surcoreanos de semiconductores Samsung Electronics y SK Hynix han dado un paso significativo en el ámbito de la inteligencia artificial al firmar memorandos de entendimiento (MdE) con la startup de inteligencia artificial OpenAI. Estos acuerdos forman parte del Proyecto Stargate, una colaboración conjunta que incluye a OpenAI, SoftBank, Oracle y la firma de inversión MGX, con un plan ambicioso de invertir 500.000 millones de dólares (426.320 millones de euros) hasta 2029 en el desarrollo de infraestructuras de IA en Estados Unidos.
Según el anuncio de OpenAI, dirigido por Sam Altman, este pacto busca aumentar el suministro de chips de memoria avanzados y expandir la capacidad de los centros de datos en Corea del Sur. Esto posicionará tanto a Samsung como a SK Hynix como «contribuyentes clave» en la carrera global por la IA. Parte del plan incluye la producción mensual de aproximadamente 900.000 obleas DRAM de alta tecnología.
Además de la producción de microchips, las compañías surcoreanas buscan integrar herramientas como ChatGPT Enterprise para optimizar sus operaciones internas y fomentar la innovación en sus procesos. Según Altman,
Corea tiene todos los ingredientes para ser líder mundial en IA: un increíble talento tecnológico, una infraestructura de primer nivel, un fuerte apoyo gubernamental y un próspero ecosistema de IA
Jay Y. Lee, presidente de Samsung Electronics, ha expresado su optimismo sobre los futuros avances derivados de esta colaboración con OpenAI. Por otro lado, Chey Tae-won, su homólogo en SK Hynix, ha subrayado las «potentes sinergias» que resultarán de la combinación de chips, energía y redes.
OpenAI también ha firmado acuerdos para explorar la construcción de centros de datos de IA en Corea del Sur, incluidas colaboraciones con el Ministerio de Ciencia y TIC (MSIT) para evaluar la viabilidad de nuevas instalaciones cerca de Seúl. Además, la startup ha establecido convenios con SK Telecom, Samsung C&T, Samsung Heavy Industries y Samsung SDS, destinados a examinar la ampliación de capacidades de los actuales centros en la región.
Con estas asociaciones estratégicas, Corea del Sur se posiciona como un actor crucial en el panorama de la inteligencia artificial mundial, fortaleciendo su infraestructura tecnológica y potenciando su capacidad de innovación a escala global.
