Las empresas coinciden en que las dificultades para encontrar talento aumentarán progresivamente si no se pone el foco en la formación digital
Las empresas y los jóvenes señalan a coro que la preparación de las nuevas generaciones que se incorporan al mercado laboral no se ajusta a las necesidades de las empresas. Así lo aseguran el 42% de las organizaciones encuestadas en el informe del estudio 'Caminos que convergen: jóvenes y empresas ante el reto del talento'. En ese informe, elaborado por KPMG y la Fundación Princesa de Girona en colaboración con la Fundación Universitaria San Pablo CEU y Enagás, se especifica que ese porcentaje se eleva hasta el 52% en el caso de los jóvenes.
Y lo que es peor, el 75% de las empresas afirman que tienen dificultades para incorporar el talento que requieren, cifra que asciende al 84% en el caso de las consideradas grandes empresas y al 93% en el caso de las compañías tecnológicas.
En el acto de presentación, el presidente de KPMG en España, Juanjo Cano, señaló que el informe constata la existencia de una brecha entre las capacidades que demandan las empresas y la formación con la que los jóvenes se incorporan al mercado laboral.
"Este hecho, además de comprometer las perspectivas de futuro de nuestros jóvenes, frena el crecimiento de nuestro país, en un momento en el que es necesario impulsar la transformación de nuestra economía hacia un modelo digital y sostenible", indica.
En su opinión, la solución a este reto pasa por una mayor colaboración entre administraciones públicas, instituciones educativas, empresas y sociedad civil, fundamental para potenciar el talento de los jóvenes en un entorno en permanente cambio.
De cara a corto y medio plazo, el 76% de empresas cree que es previsible que las dificultades para incorporar el talento necesario se incrementen en el año 2030. "Esto es muy preocupante, dado que el 78% de los encuestados considera la falta de talento como uno de los principales riesgos para la sostenibilidad del negocio", se advierte en el informe.
Según el presidente de la Fundación Princesa de Girona, Francisco Belil, las empresas valoran, más allá de la competencia tecnológica de los trabajadores, cada vez más, sus habilidades cognitivas, su capacidad de pensamiento crítico y creativo, de comunicación, de innovación, de autogestión y trabajo en equipo o su habilidad para resolver problemas.
"Todo ello, disciplinas que no se adquieren en la universidad. Así que tenemos la responsabilidad como sociedad de saber capitalizar y activar el talento de los jóvenes", ha recalcado.
De acuerdo con el informe, las empresas demandan cada vez más perfiles tecnológicos que, pese a ser más atractivos para los jóvenes, son los que registran una brecha de talento más amplia.
Según las compañías participantes en el estudio, los mayores gaps de talento se producirán en los especialistas en inteligencia artificial y machine learning (70%), los expertos en ciberseguridad (69%) y científicos y analistas de datos (66%), desarrolladores de software y aplicaciones cloud (63%) y especialistas en tecnología y transformación digital (60%).