La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, ha presentado una perspectiva optimista sobre la inflación en la eurozona, afirmando que se mantendrá cercana al 2% en el futuro cercano. Aunque las proyecciones son positivas, Lagarde ha subrayado que el entorno macroeconómico sigue siendo incierto debido a la volatilidad en las políticas comerciales globales.
Lagarde destacó durante su intervención ante el Comité de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo:
Esperamos que la inflación se mantenga en torno a nuestro objetivo del 2% en los próximos meses
. Sin embargo, advirtió que los riesgos para las perspectivas son bidireccionales.
El BCE ha decidido no recortar los tipos de interés en este momento, a pesar de un ligero aumento interanual de la inflación en hasta el 2,2%, según las recientes estadísticas de noviembre. La inflación subyacente, por su parte, se mantiene estable en el 2,4%.
En términos de crecimiento económico, la economía europea experimentó un crecimiento del 0,2% en el tercer trimestre, basado principalmente en la fuerza de la demanda interna, particularmente en el sector de servicios. No obstante, la industria europea ha enfrentado dificultades debido a la inestabilidad mundial, la apreciación del euro y las barreras comerciales, incluyendo los aranceles estadounidenses.
Lagarde instó a reducir las barreras internas al comercio y armonizar legislaciones dentro del mercado único, señalando que estas barreras equivalen a aranceles efectivos del 65% para bienes y del 110% para servicios. Expresó:
Si todos los miembros de la zona euro aplicaran las mismas barreras que los Países Bajos, eliminaríamos el impacto negativo de los aranceles de Estados Unidos
.
Por último, la presidenta mencionó una próxima propuesta regulatoria para simplificar el sistema financiero, que será presentada por su lugarteniente, el español Luis de Guindos, la próxima semana.


