La sostenibilidad se ha convertido en un factor esencial para satisfacer las expectativas de los consumidores y para garantizar la viabilidad a largo plazo de estas organizaciones. El informe ‘Extrayendo valor de la sostenibilidad en TMT’, elaborado por Monitor Deloitte, analiza cómo pueden las compañías de la industria aprovechar todas las oportunidades que brinda la inversión en sostenibilidad y lograr potenciar sus objetivos financieros.
La demanda de sostenibilidad está en aumento, impulsada por consumidores y empresas que valoran cada vez más las prácticas responsables. Esta tendencia, que se espera que continúe creciendo en 2024, obliga a las empresas del sector a integrar la sostenibilidad en sus modelos de negocio.
A medida que la conciencia social sobre el cambio climático y la responsabilidad social empresarial crece, los consumidores están optando por marcas que demuestran un compromiso genuino con el medio ambiente. Las organizaciones que ignoren estas demandas corren el riesgo de perder cuota de mercado frente a competidores más responsables.
Las empresas están implementando diversas iniciativas para reducir su huella de carbono, lo que incluye la optimización del uso de recursos y la adopción de tecnologías limpias. Por ejemplo, el uso de energía renovable para alimentar centros de datos y redes de telecomunicaciones es un paso significativo hacia la sostenibilidad.
Además, muchas organizaciones están comenzando a establecer metas de neutralidad de carbono, lo que implica no solo reducir las emisiones, sino también invertir en proyectos de compensación de carbono.
A su vez, las regulaciones gubernamentales están desempeñando un papel crucial al impulsar a las empresas a adoptar prácticas sostenibles. Se prevé que en 2024 las normativas relacionadas con la sostenibilidad se vuelvan más estrictas, lo que requerirá que las empresas se adapten rápidamente a estas nuevas exigencias.
La regulación puede incluir incentivos fiscales para las empresas que adopten prácticas sostenibles, así como sanciones para aquellas que no cumplan con los estándares establecidos. Este entorno regulatorio crea tanto un desafío como una oportunidad para las organizaciones, que deben encontrar formas innovadoras de cumplir con estas normativas.
Las tecnologías emergentes están cambiando radicalmente el panorama del sector TMT. La adopción de inteligencia artificial (IA) y análisis de datos está aumentando rápidamente, permitiendo a las empresas optimizar sus operaciones y ofrecer experiencias personalizadas a los clientes. Las empresas que utilizan IA para analizar patrones de comportamiento del consumidor están mejor posicionadas para anticipar las necesidades de sus clientes y adaptar sus ofertas en consecuencia. Esto no solo mejora la eficiencia, sino que también reduce costos operativos y permite una mayor flexibilidad en la toma de decisiones.
Las compañías del sector de la tecnología y las telecomunicaciones exploran nuevos modelos de negocio que integran la sostenibilidad en su oferta, con servicios que promueven la economía circular
La implementación de 5G es otra tendencia transformadora, ya que se espera que facilite la expansión de Internet de las Cosas (IoT). Esto impulsará la creación de soluciones innovadoras en diversos sectores, desde la salud hasta la industria automotriz. Por ejemplo, en el ámbito de la salud, 5G permitirá el monitoreo en tiempo real de pacientes y la telemedicina, mejorando significativamente la calidad del servicio. En el sector automotriz, la conectividad 5G habilitará vehículos autónomos que podrán comunicarse entre sí y con la infraestructura urbana, lo que conducirá a una mayor seguridad y eficiencia en el transporte.
A medida que las empresas adoptan tecnologías más avanzadas, la ciberseguridad se convierte en una prioridad crítica. Con el incremento de la digitalización, las organizaciones están expuestas a una mayor cantidad de amenazas cibernéticas. Invertir en tecnologías de seguridad y en la capacitación del personal será esencial para proteger los datos sensibles y mantener la confianza del cliente. Las empresas deben adoptar un enfoque proactivo en la gestión de riesgos, implementando protocolos de seguridad robustos y asegurando que su infraestructura tecnológica esté actualizada frente a las últimas amenazas.
El entorno actual también presenta numerosas oportunidades de crecimiento. Las empresas de TMT están explorando nuevos modelos de negocio que integran la sostenibilidad en su oferta, incluyendo servicios que promueven la economía circular y el uso eficiente de los recursos.
Este enfoque no solo se alinea con las expectativas del consumidor moderno, sino que también puede resultar en una ventaja competitiva sustancial. Las organizaciones que desarrollan productos y servicios sostenibles no solo mejoran su imagen de marca, sino que también pueden beneficiarse de la reducción de costes a largo plazo.
Además, las colaboraciones estratégicas con startups y otros actores del ecosistema tecnológico se han vuelto fundamentales para impulsar la innovación y desarrollar soluciones sostenibles. Estas alianzas no solo facilitan el acceso a nuevas tecnologías, sino que también aceleran el desarrollo de productos, permitiendo a las empresas adaptarse más rápidamente a las necesidades cambiantes del mercado. La cooperación entre sectores, como la tecnología, la energía y el medio ambiente, puede dar lugar a innovaciones que beneficien a todas las partes involucradas.
Fomentar una cultura organizacional que valore la sostenibilidad y la innovación es crucial para atraer y retener talento. Las empresas que priorizan estos valores estarán mejor posicionadas para enfrentar los desafíos del futuro. Además, es evidente que un entorno de trabajo que fomente la creatividad y la responsabilidad social no solo aumenta la satisfacción de los empleados, sino que también mejora la productividad y la lealtad hacia la marca. En este sentido, la capacitación y el desarrollo profesional son fundamentales para preparar a los empleados para el futuro.