Las bodegas españolas han expresado su preocupación ante la amenaza del presidente estadounidense, Donald Trump, de imponer un arancel del 200% a los vinos y otras bebidas alcohólicas procedentes de la Unión Europea (UE). La situación se ha considerado crítica, dado que este tipo de medidas podrían afectar drásticamente la presencia del vino español en el mercado estadounidense.
José Luis Benítez, director general de la Federación Española del Vino (FEV), subrayó la necesidad urgente de que la Unión Europea y el Gobierno de Estados Unidos inicien negociaciones inmediatas. Benítez destacó que no es justo que productos como el vino sean utilizados como moneda de intercambio en disputas comerciales que no tienen relación con ellos.
Es absolutamente necesario que la Unión Europea y el Gobierno de Estados Unidos se pongan a negociar cuanto antes
El director general también recalcó que el mercado estadounidense es de vital importancia para los vinos españoles, señalando que es inadmisible que se vea perjudicado por decisiones arbitrarias. «Urgimos a la Unión Europea y al Gobierno norteamericano a que se sienten a negociar y resuelvan las disputas comerciales del aluminio y el acero y no pongan aranceles en otros productos», manifestó.
Por otro lado, el sector cervecero español también ha mostrado su preocupación por la amenaza de estos aranceles, que se suman a la ya anunciada sobre el aluminio. Jacobo Olalla, director general de Cerveceros de España, afirmó que «los aranceles no benefician a nadie y lo único que hacen es empobrecer a un país y al consumidor».
Los aranceles no benefician a nadie y lo único que hacen es empobrecer a un país y al consumidor
En este contexto, el presidente Trump justificó su amenaza de imponer aranceles a los productos europeos al señalar que la UE es una de las entidades arancelarias más hostiles del mundo. Si no se revoca el gravamen del 50% sobre el whisky estadounidense, se dicen medidas drásticas que afecarán a toda la industria vitivinícola y cervecera de Europa.